MADRID, 8 Sep. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Irán, Ebrahim Raisi, ha advertido este miércoles que las "acciones poco constructivas" amenazan con "interrumpir" las negociaciones sobre el acuerdo nuclear y, por tanto, podrían propiciar la salida de Irán de las conversaciones.
Raisi ha mantenido una conversación telefónica con el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel --que le ha urgido a retornar "rápidamente" a las negociaciones--, a quien ha asegurado que "es natural que en el caso de un "comportamiento no constructivo en la Agencia Internacional de la Energía Atómica (AIEA)" no se puede esperar que "Irán tenga una respuesta constructiva".
Las declaraciones del nuevo mandatario iraní siguen la línea de la postura adoptada por su nueva Administración en las últimas semanas, que considera que la "presión" de Occidente hace peligrar el acuerdo nuclear. Se espera que las negociaciones se reanuden con un nuevo equipo negociador, no obstante, Teherán ha apuntado que la formación del nuevo equipo se puede demorar todavía dos o tres meses.
Así, Raisi ha reivindicado este miércoles en su conversación con Michel que Irán no violó el acuerdo nuclear, sino que fue Estados Unidos quien lo hizo, informa la agencia de noticias iraní Mehr, y es precisamente a Washington a quien ha reprochado que no haya habido "ningún cambio en la política estadounidense hacia Irán".
"Se ha mantenido el mismo enfoque y las mismas medidas, es decir, las sanciones y la presión sobre Irán", ha criticado el presidente.
Además de las negociaciones nucleares, ambos líderes también han abordado las relaciones bilaterales entre Irán y la Unión Europea, ante lo que Raisi ha manifestado su intención de desarrollarlas, aunque ha advertido que para que esto suceda, Bruselas debe distanciarse de las medidas que adopten países como Estados Unidos.
En la llamada, ambos dirigentes han tratado también la situación en Afganistán, y Raisi ha insistido en la necesidad de que el país cuente con un gobierno "inclusivo", mientras que Michel ha recalcado que Bruselas y Teherán tienen "intereses comunes".
