DAKAR, 27 Nov. (EP/AP) -
Tropas de pacificación de las Naciones Unidas se enfrentaron hoy con fuerzas que intentaban avanzar hacia la capital de una provincia del este de la República Democrática del Congo (RDC) y leales a un general disidente, según informó el portavoz de la ONU, Kemal Saiki, desde la capital, Kinshasa.
"Las tropas de la ONU fueron atacadas por asaltantes en los alrededores de Sake y respondieron al ataque", declaró Saiki. Un helicóptero de asalto fue solicitado en torno a las 7 de la mañana de hoy, y con él se ha conseguido contener el avance del contrincante hacia la capital de la provincia de Goma.
El primer conflicto estalló en la zona ayer domingo, cuando tropas leales al 'señor de la guerra', Laurent Nkunda, combatieron con fuerzas del Ejército congoleño. Miles de personas han huido hoy de Sake, una ciudad de 12.000 habitantes y 30 kilómetros al oeste de Goma.
La ONU posee 3.500 efectivos en la zona, tan sólo una parte de los 17.500 que aproximadamente se encuentran en el país para mantener la paz, mientras que la RDC intenta llevar a cabo la transición democrática después de la finalización de la guerra que tuvo lugar entre 1998 y 2002 y las décadas de dictadura que la han precedido.
"El ataque ha sido frenado, pero las fuerzas de Nkunda permanecen en posición", informó Saiki, quien añadió que continúan hoy los intercambios esporádicos de disparos. En cualquier caso, afirmó que la ONU mantenía el control de Sake.
Aunque un acuerdo de paz ha acabado formalmente con la lucha en la RDC, el Gobierno sigue luchando para obtener el control del este del país, vasta región que se encuentra actualmente al margen de la ley.
Después de que la guerra en Congo acabara, Nkunda, un antiguo general, abandonó el Ejército e impulsó una rebelión contra el Gobierno porque consideraban que la minoría tutsi era la única beneficiaria de la transición democrática.
El Ejército congoleño ha registrado tres muertes y en torno a 50 heridos desde ayer, según dijo Jaqueline Chenard, una portavoz de la ONU en Goma. Asimismo, informó de que en la ONU no se habían producido bajas y aseguró desconocer las habidas en el lado de Nkunda.
Estados Unidos impusieron recientemente sanciones a Nkunda y otros seis empresarios y señores de la guerra acusados de promover la inestabilidad en el país. La congelación de sus activos es una de las medidas tomadas, cuando determinadas fuentes sostienen que los propios americanos realizan negocios con ellos.
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