BEIRUT, 6 May. (Reuters/EP) -
Los rebeldes sirios todavía no han acordado con las fuerzas del régimen un plazo para retirarse de la ciudad de Homs, en el centro del país, y aún podría llevar varios días concretar el calendario, según el gobernador provincial, Talal Barazi.
Los combatientes opositores se han atrincherado en el casco antiguo de Homs y en otras zonas de la ciudad a pesar de haberse quedado sin suministros y sin armas y llevar más de un año bajo asedio. Su retirada, acordada el viernes junto a un alto el fuego, sería un triunfo simbólico para el Gobierno de Bashar al Assad.
Sin embargo, Barazi ha admitido que todavía no hay plazos cerrados. "Las condiciones y la atmósfera son las adecuadas para lograr pasos positivos hacia la reconciliación y el éxito de los grupos armados, pero no se ha fijado ninguna fecha", ha dicho a la televisión de Hezbolá, Al Manar. El gobernador confía en que en los "próximos días" se pacte el calendario definitivo.
El Observatorio Sirio para los Derechos Humanos ha informado de que la ONU y los consejos locales mediaron en las conversaciones entre los grupos rebeldes, por una parte, y las fuerzas del Gobierno, las milicias leales al régimen, Hezbolá, y las autoridades provinciales, por otra. También han estado presentes trabajadores de las embajadas de Rusia e Irán, aunque el grupo no ha podido verificar cuál fue su participación.
El acuerdo contempla, además de la retirada rebelde, la entrega de alimentos y medicinas a las ciudades chiíes de Nubl y Al Zahraa, en la provincia de Alepo y asediadas por la oposición desde hace más de un año.
