BRASILIA, 10 Mar. (EUROPA PRESS) -
La presidenta brasileña, Dilma Rousseff, ha confiado este martes en que la economía del país supere la crisis en la que se encuentra inmerso antes de "final de este año" y ha asegurado que su Gobierno trabajará para que así sea.
"Vamos a hacer todo los esfuerzos a nuestro alcance para que, antes de final de año, los signos de recuperación ya empiecen aparecer", ha declarado la mandataria en la apertura del 21º Salón Internacional de la Construcción, que se celebra en Sao Paulo.
La presidenta ha reconocido que el país atraviesa un momento delicado. "No ignoro la desaceleración del sector (de la construcción) y de la economía que se vive en el momento actual", ha afirmado, en declaraciones recogidas por Agencia Brasil. "Estoy trabajando de forma sistemática para superar ya este año esa desaceleración", ha agregado.
Este lunes Rousseff ya había hecho referencia a la situación económica en el país y a las protestas contra el Gobierno que se produjeron el pasado domingo en algunas zonas del país. En este sentido, ha considerado que se ha venido exagerando la situación.
"Ni de lejos estamos viviendo una crisis de las dimensiones que algunos dicen que estamos viviendo", aseveró la mandataria. "Estamos atravesando por problemas estrictamente coyunturales, porque nuestros fundamentos hoy en día son sólidos", agregó.
En este sentido, defendió nuevamente las medidas de ajuste fiscal que ha propuesto su Gobierno. "Hay que llevar a cabo correcciones y ajustes" de ahí, afirmó, "las medidas de ajuste en las cuentes públicas" ya que el Presupuesto del Estado "absorbe una parte importante de la crisis". Estos ajustes, insistió, buscan permitir de nuevo el crecimiento.
