R.Unido.- Las seguridad fronteriza británica en entredicho tras la entrada de una periodista 2 veces con pasaporte falso

LONDRES, 1 Dic. (EUROPA PRESS) -

La seguridad fronteriza de Reino Unido ha quedado seriamente en entredicho después de que una periodista de la cadena británica BBC lograra entrar en el país en dos ocasiones mostrando documentación falsa y robada, según explica la cadena, que además sostiene que Shahida Tulaganov logró hacerse con 20 pasaportes falsos en el curso de su investigación, cada uno de un país de la UE diferente.

Los que le vendieron los documentos aconsejaron a la reportera viajar por mar o en autobús, alegando que la seguridad en los puertos es mucho menos fuerte que en los aeropuertos. El Ministerio del interior británico asegura que está trabajando junto con la UE para atajar seriamente el problema de los documentos falsos.

Según la cifras facilitadas por el 'Home Office', en 2004 se detectaron en Reino Unido 8.285 documentos fraudulentos en puertas de entrada al país. La pena por entrar con pasaporte falso en Reino Unido o robarlo acarrea una sentencia máxima de diez años de cárcel, mientras que realizar una declaración falsa para obtener un pasaporte se castiga con un máximo de dos años.

Tulaganov viajó por toda Europa para obtener sus documentos falsos. El precio osciló entre las 250 libras esterlinas (370 euros) y las 1.500 (2.230 euros), y mientras algunos le fueron facilitados en pocos días, otros tardaron semanas.

El primer traficante de pasaportes falsos que encontró la periodista fue en el centro de Londres, a través de un anuncio publicado en un periódico en ruso. El traficante, Henry, le ofreció un pasaporte checo, consiguiendo a alguien de parecido físico a la periodista y que los solicitaría por ella utilizando su foto.

El resto de pasaportes que obtuvo fueron de nacionalidades británica, alemana, francesa, italiana, sueca, danesa, finesa, estoniana, holandesa, belga, española, portuguesa, griega, eslovena, polaca, austriaca, eslovaca, lituana y letona.

Shahida entró a Reino Unido por barco, desde España hasta el puerto de Portsmouth con un pasaporte falso letón, y posteriormente entró en el tren Eurostar usando un pasaporte de Estonia.

El Ministerio del Interior asegura que hay un "intercambio bilateral seguro de información entre los estados miembros en cuanto al asunto de pasaportes perdidos y robados de ciudadanos de la UE". Además mantiene que todos los agentes de inmigración están altamente entrenados en la identificación de documentos falsos.

"Todos nuestros agentes de inmigración en puertos británicos están formados en técnicas de detección y tienen acceso a equipamiento especial para ello", aseguró un portavoz.