Rusia y los rebeldes de Donestk acusan a Ucrania del ataque contra el líder de la autoproclamada república

El líder de la autoproclamada república de Donestk, Alexander Zakharchenko
REUTERS / SHAMIL ZHUMATOV
Actualizado: viernes, 31 agosto 2018 18:44

MADRID, 31 Ago. (EUROPA PRESS) -

Rusia y los rebeldes de Donestk han acusado a Ucrania del ataque que este viernes le ha costado la vida al líder de la autoproclamada república, Alexander Zakharchenko.

"Hay muchas razones para pensar que su asesinato fue organizado por el régimen de Kiev, que ha utilizado varias veces métodos similares para eliminar a disidentes e indeseables", ha dicho la portavoz del Ministerio de Exteriores de Rusia, Maria Zajarova.

La funcionaria rusa ha reprochado al Gobierno de Petro Poroshenko que, "en lugar de cumplir los Acuerdos de Minsk y buscar vías para resolver el conflicto interno, implementa el guión terrorista, agravando aún más la situación en la región, ya de por sí complicada".

Zajarova, citada por la agencia de noticias oficial Sputnik, ha hecho un llamamiento a la comunidad internacional para que se lleve a cabo "una investigación imparcial" sobre el ataque, "teniendo en cuenta el carácter títere del sistema político de Ucrania.

En la misma línea, el presidente del parlamento rebelde de Donestk, Denis Pushilin, ha afirmado que "se trata de una nueva agresión por parte de Ucrania".

"Por desgracia, el jefe de la República Popular de Donetsk (RPD), Alexandr Zajarchenko, ha muerto en un ataque terrorista", ha informado la agencia de noticias DAN-News, controlada por los insurgentes prorrusos.

Zajarchenko ha muerto por la explosión de una bomba en la cafetería donde se encontraba, en el centro de Donestk, a pocos metros de su casa. Otras tres personas han resultado heridas.

De acuerdo con medios afines a los separatistas ucranianos, Zakharchenko ha resultado gravemente herido, por lo que se le ha trasladado a un hospital cercano, donde finalmente ha fallecido.

Las provincias de Donestk y Lugansk, en el este de Ucrania, viven desde hace cuatro años un conflicto armado que enfrenta a las tropas del Gobierno y a los separatistas prorrusos. A pesar de los acuerdos de paz firmados en 2015 en la capital bielorrusa, la guerra continúa. Más de 10.000 personas han muerto y otras miles se han visto desplazadas.

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