VIENA, 20 Feb. (EUROPA PRESS) -
El ministro de Exteriores serbio, Vuk Jeremic, declaró hoy que Serbia nunca permitirá que que Kosovo entre como miembro de la OSCE o de otras organizaciones internacionales, especialmente en las que tengan capacidad de veto y pidió a ese organismo que condene la independencia de su ex provincia.
"La soberanía del Estado y su legitimización internacional se miden por su pertenencia a organizaciones internacionales", afirmó el ministro, tras una sesión de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) en Viena. "Mientras serbia siga estando reconocida internacionalmente, como un Estado libre e independiente, Kosovo no será miembro de esas organizaciones", añadió en un comunicado.
Además, el jefe de la diplomacia serbia aseguró que no hay nada que les puedan ofrecer a cambio de Kosovo, incluyendo la entrada en la Unión Europea o préstamos millonarios. "No todo está en venta. Uno no puede vender la historia, la democracia, la integridad territorial o sus valores", agregó.
Así mismo, Jeremic rechazó la decisión de austria de reconocer la independencia de la ex provincia Serbia y resaltó que el embajador serbio en Viena será llamado a consultas si ese país reconoce definitivamente a Kosovo y que seguramente tendrá efectos económicos y en las relaciones bilaterales.
PLAN DE ACCIÓN
Por otra parte, el ministro explicó que la retirada de los embajadores es sólo el primer paso de un plan de Acción establecido para protestar por la declaración unilateral de independencia. "Nunca haremos nada en perjuicio de Serbia, y no fallaremos al hacer nuestra posición más fuerte y prevenir que la independencia de Kosovo sea actual y formal", indicó.
Por último, Jeremic aseguró que hoy se dirigirá al Comité de Ministros del Consejo de Europa en Estrasburgo así como al Comité de Política Exterior del Parlamento Europeo.
