MADRID, 27 Abr. (EUROPA PRESS) -
El Ejército sirio acusa a grupos terroristas de haber provocado la muerte de tres soldados y heridas a otros 15 en varios ataques contra emplazamientos militares y de seguridad, situados en la carretera que dirige a la región de Golán (suroeste), cerca de Deraa. Varios terroristas habrían resultado igualmente muertos o heridos.
Una fuente militar citada por la agencia oficial SANA asegura que las unidades del Ejército desplegadas en la ciudad de Deraa dieron caza a estos terroristas, quienes habían cortado algunas calles. El Ejército sostiene que estos individuos agredieron a viandantes y les robaron sus pertenencias para atemorizarles.
Los soldados lograron detener a algunos de los insurgentes para investigarles, después de requisar una gran cantidad de armas y municiones.
Las fuerzas sirias insisten en que su objetivo final es capturar a estos extremistas para que la ciudad de Deraa --uno de los epicentros de las revueltas antigubernamentales-- pueda volver a la normalidad lo antes posible. Las Fuerzas de Seguridad Internas calculan que un total de 295 agentes han resultado heridos desde que comenzaron las revueltas. En apenas dos días habrían sufrido heridas nueve efectivos.
La versión oficial no recoge el impacto de las operaciones militares sobre la población. La organización de Derechos Humanos Sawasiah cifra en no menos de 35 los civiles muertos desde el lunes a consecuencia de la ofensiva. El número total de bajas civiles por los enfrentamientos podría acercarse a los 400, de acuerdo con los datos de Sawasiah y Amnistía Internacional.
Los manifestantes opositores exigen la marcha del presidente, Bashar al Assad, quien hasta el momento desatiende las voces en su contra desde las filas opositoras y del exterior. Al Assad achaca las refriegas a una campaña de desestabilización orquestada por extremistas y agentes externos.
