TPIY.- Belgrado no indultará a Mirjana Markovic y considera improcedente un funeral de Estado por Milosevic

Europa Press Internacional
Actualizado: lunes, 13 marzo 2006 12:19

BELGRADO 13 Mar. (EUROPA PRESS) -

El presidente de Serbia, Boris Tadic, no indultará a la viuda de Slobodan Milosevic, Mirjana Markovic, para que pueda asistir al sepelio por su marido en caso de que se celebrase en territorio serbio, ya que, a su juicio, sería improcedente la celebración de un funeral de Estado por Milosevic dado el papel jugado por el fallecido mandatario en la historia reciente de Serbia, según informó el Gobierno en un comunicado citado por la agencia serbo-montenegrina de noticias, Tanjug.

Milosevic apareció muerto el pasado sábado en su celda del Tribunal Penal Internacional para la ex Yugoslavia (TPIY) en La Haya, tras lo cual se han disparado las discusiones sobre el lugar en que debería ser enterrado el ex dictador. Serbia, Montenegro y Rusia son las propuestas.

Un funeral en Serbia podría suponer un importante punto de encuentro para los simpatizantes de Milosevic, pero la viuda, Mirjana Markovic, y su hijo Marko, que huyó a Rusia y se encuentra bajo una orden de arresto internacional, serían detenidos si acudiesen a Serbia al funeral, ya que están acusados de abuso de poder durante el mandato de Milosevic. Por ello, madre e hijo quieren que Milosevic sea enterrado en Moscú, donde ambos viven, informó la agencia de noticias serbia Beta.

Sin embargo, el hermano de Milosevic, Borislav, que también vive en la capital rusa, sugirió a la agencia serbia que el ex presidente debería ser enterrado "en su propio país como un hijo que es de Serbia". Para añadir más confusión a la disputa, la hija del presidente, Marija, señaló que su padre debería ser enterrado en Montenegro, en el panteón que tiene la familia en la localidad de Lijeva Rijeka, unos 50 kilómetros al norte de Podgorica.

El cuerpo de Milosevic, de 64 años, fue descubierto entre las 9:00 y las 10:00 horas del sábado por la mañana por un guardia en su celda del TPIY, que le juzgaba por los cargos de genocidio y crímenes contra la humanidad.

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