LAGONISI (GRECIA), 13 Oct. (EP/AP) -
Los ministros de Asuntos Exteriores de los ocho países mediterráneos de la Unión Europea pidieron al resto de socios europeos que haya corresponsabilidad de todos en la vigilancia de las costas europeas para frenar el fenómeno de la inmigración ilegal, según explicó la ministra griega, Dora Bakoyannis, en rueda de prensa.
Quince días después de la reunión ministerial de Madrid, los ocho países del sur de la UE se volvieron a reunir esta vez en Lagonisi (Grecia), cerca de la capital Atenas y en un formato informal. La delegación española la encabezó el ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos.
El jefe de la Diplomacia española y sus homólogos mediterráneos de la UE acordaron impulsar la promoción de un Servicio de Guardacostas a nivel europeo. La responsable griega fue la única en comparecer ante la prensa para dar cuenta de los resultados de la reunión.
"Es muy injusto pedir a Grecia que pague todos los costes del bloqueo de sus fronteras para evitar la inmigración a Europa", dijo Bakoyannis tras recordar que su país cuenta con alrededor de 2.000 islas en el Mar Egeo y que el pasado año llegaron más de 3.600 inmigrantes indocumentados.
Respecto a la propuesta de un Guardacostas europeo, la ministra griega subrayó que se necesita aún tiempo para que este asunto sea abordado en profundidad por los Veinticinco. "Las cosas se desarrollarán gradualmente y progresaremos", indicó sin dar más detalles sobre el proceso.
La UE carece en estos momentos de una política común en materia de inmigración, dejando a los Estados miembros las labores de patrullaje de sus propias fronteras marítimas.
