PEKÍN, 5 Jul. (Reuters/EP) -
El presidente de China, Xi Jinping, ha asegurado este miércoles que la lucha contra la corrupción no ha terminado en el país y ha alertado de que el Partido Comunista chino (PCCh) se enfrenta a numerosos desafíos a la hora de seguir adelante.
Desde que llegó al poder hace cuatro años, Xi ha reiterado que la corrupción supone un problema tan grave en el país y que ésta podría afectar de forma interna al gubernamental partido, cuya integridad se encuentra en tela de juicio.
La formación ha insistido en que la batalla anticorrupción "siempre estará sobre la mesa", mientras que Xi ha resaltado que todas las medidas puestas en marcha para impulsar la disciplina interna del partido han logrado "notables resultados".
"Aún así, continúa estando lejos de obtener un gran éxito", ha manifestado el presidente chino. "Hay que resolver el pensamiento impuro, las políticas impuras, la organización impura, y el estilo de trabajo impuro que predomina en el partido", ha aseverado.
"Tenemos que garantizar que estamos preparados para cualquier imprevisto y realzar nuestro sentido de la responsabilidad", ha instado Xi, que ha afirmado que el PCCh debe desarrollar un buen sistema para entrenar, gestionar y seleccionar a sus altos cargos.
En este sentido, el dirigente ha indicado que a la hora de designar a un alto cargo es necesario "seguir un criterio de integridad".
