SANAA, 21 Sep. (EP/AP) -
La oposición denunció hoy irregularidades en las elecciones presidenciales de Yemen, las cuales, según datos de la Comisión Electoral, darían un amplio margen de victoria al actual presidente, Alí Abdalá Saleh.
Pocas horas después de que cerraran los colegios electorales, y con un 4% computado, la comisión electoral asegura que Saleh cuenta con el 80% de los votos, y su opositor, Faisal Bin Shamlan, un 16%. La participación ha sido de un 54%.
El jefe de campaña de Bin Shamlan, Zaid Shami, desechó los resultados preliminares como "ficticios". "Son los resultados que la comisión quiere anunciar al final del conteo", dijo Shami.
"En muchos colegios electorales donde la oposición estaba avanzando, el partido en el poder creaba conflictos, como la retirada de sus representantes, para que se detuviera el conteo", añadió.
La coalición de la oposición presentó anoche 30 denuncias de irregularidades, entre las que se incluía la expulsión de observadores, el voto forzado, la intimidación de los votantes y la desaparición de urnas. El grupo informó de al menos 8 muertos y 11 heridos en violencia vinculada a los comicios.
"Los informes provinciales indican que hay un progreso real en el apoyo a la oposición", dijo el portavoz de la coalición, Mohammed Qahtan. Los resultados finales serán anunciados en sábado.
Si los observadores internacionales declaran las elecciones aceptablemente transparentes, la situación de Saleh frente a los donantes internacionales mejorará notablemente.
El Gobierno declaró la jornada de ayer "día sin armas" y amenazó a los yemeníes que portaran armas cerca de los colegios electorales. Se desplegaron 100.000 soldados para que velaran por la seguridad en todo el país. Sin embargo, eso no evitó la presencia de pistoleros en la cercanía de los colegios. En Yemen hay una media de tres armas por habitante.
En la capital, Sanaa, las autoridades detuvieron a un presunto miembro de Al Qaeda en posesión de mapas y explosivos. La Comisión Electoral explicó que pretendía atentar para entorpecer el proceso electoral.
