LOGROÑO, 28 Ago. (EUROPA PRESS) -
El Ayuntamiento de Logroño ha abierto el plazo para presentar ofertas para la construcción del Centro de la Cultura del Rioja en la capital riojana, proyectado por el arquitecto riojano Jesús Marino Pascual. El plazo para la presentación de ofertas concluye el 5 de octubre.
Precisamente hoy el alcalde de Logroño, Tomás Santos, el concejal de Casco Antiguo, Ángel Varea, y del propio Marino Pascual, presentaron las bases para la licitación de las obras. El Consistorio logroñés aprobó las mismas en la última Junta de Gobierno, que también conlleva la construcción de doce viviendas situadas en un edificio anexo, en la calle Marqués de San Nicolás.
Santos destacó que el concurso supone el "despegue definitivo" a este proyecto, que cuenta con un presupuesto de 12,1 millones de euros, repartido en tres anualidades de 1,2 en 2009; 6,4 millones en 2010; y 4,3 en 2011. El plazo de ejecución es de veinte meses.
El alcalde indicó que el Centro de la Cultura del Rioja será un "referente, potente e importante" para el centro de ciudad y el Casco Antiguo de Logroño.
Por su parte, Varea apuntó que las bases son el "pistolezo de salida" de las obras, que espera puedan comenzar a principios de diciembre. Explicó que a partir del 5 de octubre, último día para presentar ofertas, habrá un mes para analizarlas y resolver el concurso. A partir de la adjudicación, "tendrán quince días para comenzar" las actuaciones.
El concejal de Casco Antiguo afirmó que la reducción máxima del tiempo de ejecución permitida será de cuatro meses, ya que según había indicado el propio arquitecto redactor del proyecto reducirlo más, sería una "baja temeraria".
Precisamente, Marino Pascual afirmó que se trataba de un proyecto "complejo", si bien permitirá "nueva vida al Casco Antiguo, puesto que irradiará vida a esa zona de la ciudad". Afirmó que el Centro de la Cultura del Rioja va a permitir "recuperar una parte importante de la historia de Logroño".
PROYECTO
El Centro de la Cultura del Rioja estará ubicado en el solar limitado por las calles Marqués de San Nicolás, Mercaderes y Ruavieja. Además del espacio museístico, esa parcela albergará un edificio de uso residencial con doce viviendas.
Ocupará una superficie total de 4.271 metros cuadrados, y va a suponer la recuperación del edificio Casa de la Virgen y la construcción de un nuevo pabellón que albergará parte del espacio expositivo.
El edificio tendrá forma de botellero, integra la arquitectura clásica propia del Casco Antiguo con líneas contemporáneas y con materiales como el cristal, que contribuyen a aligerar los volúmenes y a crear distintos efectos visuales que varían en función de la luz.
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