Los alumnos de Hostelería cambian el individualismo de las notas por las solidaridad del trabajo en equipo

El proyecto incluye unas jornadas
ESCUELA DE HOSTELERÍA
Publicado: miércoles, 13 febrero 2019 13:56

   Un "cambio radical" para potenciar la "autonomía y la responsabilidad"

   LOGROÑO, 13 Feb. (EUROPA PRESS) -

   Los alumnos de Hostelería de Santo Domingo de la Calzada están protagonizando un cambio en su formación que supone "un viraje del individualismo de las calificaciones a la solidaridad del trabajo en equipo", tal y como ha explicado el delegado de los alumnos de Segundo de Dirección de Cocina, Pío Puente.

   En rueda de prensa, Puente, junto a la subdelegada de los alumnos de Segundo de Dirección de Cocina, Ana Aramayo, el jefe de Estudios, Iñaki Gutiérrez, y la tutora de Segundo de Dirección de Cocina, Rocío Beltrán, han dado a conocer una nueva metodología.

   A través de un modelo de aprendizaje colaborativo basado en retos, los alumnos del segundo curso del Ciclo Formativo de Grado Superior Dirección de Cocina han diseñado y organizado una serie de actividades para integrar la alimentación Kilómetro Cero en la Escuela.

   Aramayo ha relatado cómo, durante el primer trimestre, han estado trabajando de forma práctica las cuestiones teóricas "de una forma casi autónoma". Como si fuesen empleados de una empresa han tratado con proveedores, con el añadido de seguir la filosofía kilómetro cero.

   "Esto ha supuesto un cambio radical comparado con lo que veníamos haciendo. Al principio nos costó hacernos a ello, sobre todo a la autonomía y la responsabilidad. El miedo al cambio era importante, nunca habíamos trabajado tanto en equipo", ha relatado.

   Y es que, a pesar de que el cien por cien de los titulados consigue trabajo, cada vez más, las empresas demandan perfiles con mejores competencias. Así, Puente ha añadido que han mejorado distintas competencias "como la comunicación".

   En cuanto al reto, el kilómetro cero, Puente ha destacado la importancia del "compromiso" con la tierra, el medio y los productores como futuros cocineros. "Es fundamental que conozcamos la implicación económica, social y medioambiental de este sector", ha señalado.

    La estructura del segundo curso de Dirección de Cocina se distribuye en tres partes, conectadas entre sí, en las que el aprendizaje se convierte en un proceso evolutivo: en la primera evaluación se hicieron equipos de trabajo que desarrollaron proyectos relacionados con el sector de la restauración; en la segunda, se ha planteado el reto, profundizando en la metodología de Alto Rendimiento; y para finalizar, los alumnos harán la Formación en Centros de Trabajo (FCT) con la posterior presentación del Trabajo de Fin de Grado.

   Tras un primer trimestre, enfocado a adquirir conocimientos transversales y generales para dirigir y organizar la producción y el servicio de cocina, con exámenes, pruebas grupales, individuales y ejercicios teóricos, en el segundo trimestre el aprendizaje es colaborativo entre pares.

   Para evaluarlo, un pequeño equipo docente hace un seguimiento semanal a través de rúbricas que, junto con los propios estudiantes, completan con puntuaciones en un marco de autoevaluación, coevaluación y heteroevaluación.

   Los alumnos de segundo curso de Dirección de Cocina pasan de ser meros sujetos receptores, sentados en sus pupitres, a participantes que trabajan con autonomía en equipos para buscar soluciones a una situación planteada o RETO: integrar la alimentación kilómetro cero en el centro.

   El modelo kilómetro cero consiste en fomentar la compra y elaboración de productos cuyo origen es inferior a cien kilómetros del punto de referencia. La idea es promover una economía basada en la alimentación, la agricultura y ganadería, la tradición y la cultura regional.

   El proyecto incluye las Jornadas Kilómetro Cero, que se ejecutarán del 18 al 22 de febrero con distintas ponencias. Dentro de éstas, el 19 y 20, a las 15:00, horas, se servirá un menú degustación maridado con Vinos de la bodega Carlos Serres, compuesto por cinco platos, entrante y postre, con los productos de cercanía como protagonistas principales. Dichos platos serán presentados a los comensales por los alumnos, y los vinos por el bodeguero. El precio del menú completo es de 23 euros y ya se puede reservar.

Leer más acerca de: