LOGROÑO, 19 Feb. (EUROPA PRESS) -
La presidenta de la Asociación Protectora de Animales de La Rioja (Aparioja) Carmen Faulín ha criticado esta mañana "el plan de exterminio" de los gatos callejeros iniciado ya por el Ayuntamiento de Logroño. Y es que, "ya se han colocado jaulas trampa" para atrapar a los felinos y sacrificarlos. Frente a esto, el concejal de Medio Ambiente Jesús Ruiz Tutor ha afirmado que "la ley prohíbe" la existencia "de gatos callejeros", los que además "pueden transmitir enfermedades y provocar accidentes" y han constituido una "plaga que atenta contra la biodiversidad".
En declaraciones a Europa Press, Faulín ha opinado que "el sacrificio no es la solución", ya que los que queden --o otros nuevos gatos que sean abandonados-- generarán "nuevas camadas indeseadas" y el número de animales se multiplicará. "A mí me maravilla la idea del sacrificio cero", pero es "una situación idílica imposible en estos momentos", ha opinado el edil por contra.
Lo cierto es que los gatos, una vez capturados, van al Centro de Acogida de Animales municipal. Allí esperan, por ley, una ejecución que sólo puede evitarse si son adoptados. Los felinos vagabundos aguardan 8 días el indulto, mientras que los perdidos --aquellos de los que se sospecha que tienen un dueño-- permanecen en el centro 15 días. Los interesados en adoptar a los felinos pueden informarse en la web del centro (http://www.caalogro-o.es/).
Ruiz Tutor ha hecho hincapié en que la opinión de Aparioja parte de "un error de concepto" y ha insistido en que la legislación "no permite" la existencia de comunidades de gatos callejeros, estén o no esterilizados, tal como exigen los animalistas.
Sin embargo, según la presidenta de Aparioja, "tenemos que cambiar nuestra mentalidad y controlar la población mediante la esterilización y no mediante el exterminio".
EL COSTE DE SACRIFICAR
El concejal de Medio Ambiente ha negado que el sacrificio de los felinos tenga un coste extra para el Consistorio. Este servicio ya "está incluido dentro del contrato con la empresa gestora" del centro, cuya cuantía asciende a los 658.000 euros --el contrato fue firmado en 2009 y tiene una validez de 15 años. El dinero del mismo se destinó tanto a la construcción del centro, como a la gestión del mismo durante los tres lustros--. Así, es la gestora quien 'asume' el coste de los sacrificios --obviamente gracias a los 658.000 euros--.
Según la página web del propio centro, el coste de la eutanasia de un gato es de 64 euros. Asimismo, el precio de incineración de un felino es de 105, si se hace individualmente, y de 68, si los animales son incinerados de forma colectiva.
En este sentido, Faulín ha opinado que "a la larga saldrá más barato" esterilizar a los felinos, ponerles una chapa, y "tener poblaciones de gatos constantes y sanitariamente controladas".
Además, Faulín ha ofrecido el trabajo de su organización para colaborar en la labor de esterilización. Ha aclarado que Aparioja cuenta con el apoyo de veterinarios que esterilizan a los "animales a precio de coste". Es decir, la esterilización de un animal les cuesta 48 euros, que es "lo el precio de los materiales" necesarios para la intervención --anestesia, hilo para suturas...--. En cuanto al centro municipal, el precio de esterilizar a un gato es de 170 euros, mientras que para las hembras el precio asciende a los 200, según marca su página web.
Faulín ha aclarado que la asociación "no tiene capacidad económica" para sufragar el coste de todas las operaciones, pero sí harían lo posible por llegar lo más lejos posible. Sin ir más lejos, "destinar el dinero del exterminio a la esterilización sería la solución definitiva al problema".
LOS GATOS DE ROMA
Como ejemplo a seguir, Faulín ha citado la ciudad de Roma, donde los gatos campan a sus anchas y "conviven a los ciudadanos". Eso sí, "todos los animales llevan una chapa" indentificativa. Además, "la gente les da de comer y los animales se dejan acariciar" porque "nadie les hace daño".
Se trata de un caso de "convivencia sana y saludable", que cada vez va a más. Y es que, "cada vez es más la gente que les da de comer" y está en contra de que los animales sean sacrificados --o peor "envenenados" por otros vecinos o incluso "cazados", según las denuncias que han llegado a Aparioja--.
MULTAS POR ALIMENTARLES
Es más, "un grupo de vecinos de Logroño está preparando un escrito de protesta" que tienen intención de enviar a la Comisión Europea. Todo porque de un tiempo a esta parte "se ha comenzado a aplicar la ordenanza que prohíbe alimentar a los gatos callejeros". Según Faulín, "los vecinos se sienten acosados".
Las multas a los vecinos que alimentan a los animales no sólo se deben al propio incumplimiento de la ordenanza, si no también a que a veces se ensucia la ciudad. "Sí que es cierto que hay gente que es muy cochina, pero son una minoría", ha puntualizado Faulín.
El concejal de Medio Ambiente ha opinado que "no es justo" dejar a un gato en el parque "te molesta en casa" y luego "llevarle comida de vez en cuando". Al final, "todo se debe a la irresponsabilidad de los dueños".
PROBLEMAS CAUSADOS POR LOS GATOS
Ruiz Tutor opina que "el problema aumenta con la comida", ya que de esta forma los gatos tienen una ayuda extra en la lucha por la supervivencia y "no compiten en igualdad de condiciones" con el resto de los animales de la pirámide biológica.
Es más, los gatos "son un atentado contra la biodiversidad" y "perjudican" especialmente a las "aves que nidifican" en la ribera del Ebro. "También a los peces", y es que "son unos felinos" enormemente "hábiles" en la caza. En opinión de Ruiz Tutor, los gatos son "un plaga, igual que las cucarachas, los estorninos o las palomas". Sin embargo, "varios patios de vecinos tienen gatos" para mantener a raya a las ratas, ha puntualizado Faulín.
Ruiz Tutor también ha criticado que "los gatos dejan los areneros en que juegan los niños en un estado indecente". Además, "pueden causar accidentes de tráfico o transmitir enfermedades", si bien el Ayuntamiento no ha tenido constancia de que hayan sucedido incidentes como los dos últimos mencionados.
107 GATOS ADOPTADOS EN 2010
Según los datos del Ayuntamiento de Logroño, el número de gatos que llegaron al centro fueron 284 en 2010. De ellos, 107 fueron adoptados y 146 sacrificados.
