Caso Entrena: El jurado cree culpable a O.P de haber causado intencionadamiente la muerte de J.O

El procesado, O. P
El procesado, O. P - Alberto Ruiz - Europa Press
Publicado: jueves, 29 junio 2023 19:30

   Se apoya en las pruebas periciales, con sangre y adn en el lugar de los hechos, así como en los relatos de los testigos

   LOGROÑO, 29 Jun. (EUROPA PRESS) -

   El jurado popular del Caso Entrena, tras la deliberación, ha considerado, por unanimidad, culpable a O.P de haber causado intencionadamente la muerte de J.O.

   Tal y como ha leído, en la tarde de hoy, la portavoz del jurado tras una deliberación que comenzó el pasado martes, 27 de junio, a las 11:30 horas, éste considera, además, que J.O es culpable de tener armas de fuego careciendo de permiso.

   El jurado considera como un "elemento de convicción" que, en la tarde del 29 de julio O.P estaba "convencido" de que J.O le había sustraído, junto con su novia, parte de su colección de monedas.

   "Estando dolido", añade, convocó a J.O para que fuera a su domicilio en Entrena para que le pagara, al menos, parte de una deuda, sin hablarle de las monedas.

   El jurado, por unanimidad de sus miembros, ve probado que estaba convencido del robo y que causó, intencionadamente, la muerte de J.O mediante armas de fuego en el callejón tras el acceso por el portón de la asa de O.P.

   Considera probado que O.P cogió su vehículo y fue a casa del acusado; dejó a su perro en el vehículo con la ventana ligeramente abierta y entró voluntariamente en casa del acusado entre las 21:30 y 22:00 horas.

   En ese periodo el jurado cree que está probado que O.P le estaba esperando y causó intencionalmente su muerte con armas de fuego. Para ello, se apoya en uno de los testigos que oyó un golpe y cómo alguien

   metió algo en una furgoneta, y que el último grito fue desgarrador, asegurando que el sonido de los disparos le era "familiar" por el barrio en el que se había criado.

   Otro testigo habló de petardos, un ruido más suave que un arma de caza, y ladridos de perros. Otra testigo escuchó llamar a la Guardia Civil. Se unen las pruebas periciales, con una reconstrucción gráfica con la testificación de los testigos y que demuestran que es plausible la declaración de los testigos.

   Además, se aportan manchas de sangre en la rampa y adn del perfil genético de J.O y una mancha de aceite que parece vertida junto a las manchas de sangre.

   El jurado, por unanimidad, ve probado que ocasionó la muerte por sorpresa, puesto que lo había preparado y se aprovechó de la ventaja del arma de fuego, sin que J.O hubiera previsto lo que iba ocurrir.

   Cree que resulta probado que preparó los hechos porque desde el 14 de julio estuvo recabando datos para corroborar la sustracción de las monedas. Ve como prueba de que preparó los hechos la breve franja horaria en la que se cometieron.

   Por último, considerado probado que se deshizo del cuerpo y de los medios usados en un lugar indeterminado, que sigue siendo desconocido, usando para ello la furgoneta.

   Para ello, también, se apoya en los testigos, cómo uno vio como metía un bulto en la furgoneta y la ponía en marcha. Otro testigo también vio el movimiento de un coche al volver a trabajar; y una tercera testigo vio la furgoneta con la puerta abierta y como se movía.

   Se unen las pruebas periciales, muestras de sangre en la puerta del conductor, en la alfombrilla y en la zona de carga. También, adn en el portón de la furgoneta. "Hoy la ubicación del cuerpo sigue siendo desconocida", señala el jurado.

   Ve probado que en el momento de los hechos carecía de licencia tanto del arma de fuego utilizada como para la que se encontraba en su domicilio.

   Por último, considera que no procede la suspensión de ejecución de condena y no es favorable a que se proponga el indulto de la pena al Gobierno de la nación.