LOGROÑO, 19 Nov. (EUROPA PRESS) -
El Teatro Bretón, dentro de la programación del 42. Festival de Teatro de Logroño, continúa este fin de semana con la obra 'El grito' y con la función de danza 'Evolution'. La primera de ellas se representará el viernes día 19 a las 19,30 horas, mientras que el segundo espectáculo tendrá lugar el domingo 21 a la misma hora.
La programación del 42 Festival de Teatro ofrece en el Bretón de Logroño el viernes día 19, a las 19,30 horas, la obra 'El grito', que quiere rendir homenaje a esas mujeres tenaces que han sabido enfrentar grandes dificultades en el proceso de su maternidad y compartir algunas preguntas esenciales con el público.
'El grito' habla de sueños, de amor y superación; de la importancia de no dejarnos amilanar y seguir luchando por todas las personas que nos apoyaron y nos ayudaron a crecer y por los niños y jóvenes que esperan de nosotros lo mejor.
Su historia tiene lugar en alguna ciudad española de la costa mediterránea, en un periodo aproximado de ocho años, durante la crisis económica del 2008.
Aina Lóguez Amat, la protagonista, emprenderá una extenuante travesía de soledades, reproches y vulnerabilidad, atendiendo sola el cuidado de sus hijos mellizos y de su madre, mientras vive una batalla jurídica demoledora. Solo el respaldo de Patricia Palau, su abogada de oficio, y el aliento de su madre, Empar Amat, le ayudarán a enfrentar este duro proceso.
El domingo día 21, también a las 19,30 horas, llegará al escenario del Bretón el espectáculo de danza 'Evolution', en el que la compañía Acosta Danza ofrece algunas piezas significativas de su repertorio: el misterio del espectáculo Satori y la fiesta en el atardecer de Paysage, soudain, la nuit; baile y matemáticas en Twelve y, en Impronta, la fusión de la danza folclórica con la contemporánea. Música cubana, artes visuales y la energía proverbial de los bailarines de la isla.
Carlos Acosta nació en La Habana en 1973 y se formó en la Escuela Nacional de Ballet de la capital cubana. Tras ganar varios premios, incluyendo el Prix De Lausanne de 1990, bailó profesionalmente en las compañías más prestigiosas del mundo hasta su retirada como bailarín en 2016.
Fue Primer Bailarín del Royal Ballet de Londres, compañía que se convirtió en su hogar. Pero su contribución a la danza continuó a partir de 2015, año en que fundó su compañía Acosta Danza en La Habana con el deseo de mostrar al mundo el nuevo talento artístico de Cuba.
Para ello cuenta con un elenco formado por los mejores bailarines de su país y una selección de los mejores coreógrafos invitados de todo el mundo.
