LOGROÑO, 8 Mar. (EUROPA PRESS) -
La secretaria de Igualdad del PSOE riojano, Emilia Fernández, achacó hoy al "desinterés" del Gobierno riojano en desarrollar la Ley de Igualdad el hecho de que el año pasado descendieran, en La Rioja, el nueve por ciento los permisos por paternidad.
Fernández celebró un desayuno informativo acompañada de diversos dirigentes socialistas, entre ellos, el secretario general, Francisco Martínez Aldama, en el marco de la celebración del Día de la Mujer Trabajadora.
En él, criticó el "escaso impulso" que, desde el Gobierno de La Rioja, se está dando a las políticas de igualdad. Algo a lo que sumó el "escaso interés" del Ejecutivo regional por poner en marcha plazas públicas de guardería.
Frente a esto, lanzó el mensaje de que la igualdad debe ser "factor decisivo para salir de la crisis y programar el crecimiento futuro". Así, consideró que, a través de la igualdad laboral y salarial, las mujeres podrán "aportar más beneficios fiscales".
Hoy, consideró, es una fecha para "reivindicar la igualdad". Añadió que, en los últimos seis años, se ha dado un "notable avance gracias a la política de Zapatero" y, así, añadió, "por primera vez la igualdad está presente en la reforma laboral y en la Ley de Economía Sostenible".
Para Fernández, frente a esto, el PP "siempre se ha opuesto a los avances" y, en La Rioja, "no toma con interés la Ley de Igualdad, no la divulga ni establece programas para que se cumpla en las empresas".
No obstante, recordó que, a instancias del PSOE, se va a crear en el Parlamento, a partir del pleno de hoy, una comisión que estudie la forma de que los diputados regionales puedan continuar ejerciendo el derecho al voto a pesar de estar de baja maternal, o paternal, bien de forma telemática o con el voto delegado.
Según sus datos, las españolas ganan un veinte por ciento menos que los hombres; y el once por ciento de los hombres que trabaja a tiempo parcial lo hace por cuidado de hijos, frente al cuarenta por ciento de las mujeres.
Añadió a esto que el 75 por ciento de las trabajadoras reconoce que ha tenido problemas laborales por su maternidad; y el noventa por ciento piensa que el pedir una reducción de jornada puede perjudicarle.
