MADRID, 22 Mar. (EUROPA PRESS) -
Un acusado de matar a un indigente de una patada en la cabeza en un parque de Moncloa ha declarado en el juicio que solo le dio "una pequeña patada en el pie" para despertarle sin intención de matarle, manifestando que el saco de escombros que le tiró encima tras la agresión era "una broma".
La Audiencia Provincial de Madrid ha conformado esta mañana el jurado popular que deliberará sobre los hechos objeto del procedimiento ocurridos el 14 de junio de 2020. El acusado se enfrenta a una pena de 18 años de cárcel por un delito de asesinato.
En su declaración, el hombre ha narrado que se produjo una discusión horas antes de los hechos en Avenida de América por un asunto relacionado con un robo, un extremo que ha desvinculado de los hechos juzgados.
Según su versión, le dio una pequeña patada en el pie solo para despertarle y se fue, estando entonces con un amigo de la víctima. "No se me ocurriría matarle", ha dicho.
Al rato, le echó a modo de broma un saco de escombros con piedras encima, desconociendo que estuviera ya muerto. Fue una trabajadora de una clínica cercana al parque la que dio a las siete de la mañana la voz de alarma a los servicios de emergencias.
Los hechos se produjeron sobre las 21 horas del 14 de junio de 2020 cuando el acusado se aproximó en un parque de Madrid a I.G., con quien había mantenido una discusión.
"Aprovechando que es se encontraba tumbado encima de un banco, dormido y bajo los efectos del alcohol, con el fin de acabar con su vida o al menos aceptando que tal resultado se produjera a consecuencia de su acción, cogió carrerilla y súbitamente le propinó una fuerte patada en la cabeza que le causó un traumatismo cráneo-encefálico cerrado/hemorragia/hematoma subdural agudo que le produjo la muerte" relata la Fiscalía en su escrito de acusación.
Como consecuencia de los presentes hechos, el acusado se encuentra en prisión provisional desde el 28 de junio de 2020. La víctima, de nacionalidad rumana, no tiene familia conocida en España.
LA INVESTIGACIÓN POLICIAL
El cadáver fue encontrado por un vecino el citado día sobre las 7.15 horas en el número 90 de la calle General Díaz Porlier, muy cerca del Hospital La Princesa, en el madrileño distrito de Salamana.
Tras el aviso, hasta el lugar acudieron sanitarios del Samur-Protección Civil, que solo confirmaron el fallecimiento de este individuo por golpes en la cabeza, ya que no había posibilidad de reanimación, detalló en su momento a Europa Press un portavoz de Emergencias Madrid.
