MADRID, 21 Oct. (EUROPA PRESS) -
El diputado del PSOE en el Congreso Elviro Aranda afirma hoy que la trama Gürtel "además de un caso de corrupción generalizada el en PP, está sirviendo para poner en evidencia hasta donde puede llegar el comportamiento despótico y autoritario de un partido político henchido de poder".
Después del levantamiento parcial del sumario del caso Gürtel, que investiga el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM), el diputado se refiere en un post de su blog con fecha 20 de octubre al cambio en el Reglamento de la Asamblea de Madrid que han impulsado los populares madrileños para evitar que los tres diputados imputados en el caso conformen un Grupo Mixto, y lo considera un "desafuero inconstitucional".
El socialista dice que el "problema" de la reforma empieza cuando se conoce que "según el portavoz del PP, la norma que va a constituir la figura del 'diputado no adscrito' es de aplicación incluso ante de ser aprobada por la Cámara", en referencia a la disposición adicional de la propuesta popular que señala que la norma será de aplicación cuando sea calificada por la Mesa.
"¡Desde luego esto sí que es un 'avance' en el derecho parlamentario y la técnica legislativa! Incluso yo diría que estamos ante el cambio en las prácticas legislativas más importante que se han dado en los últimos 200 años. Basta con que los portavoces se pongan de acuerdo sobre iniciar el trámite de una norma para que ésta quede inmediatamente en vigor, ¡nada más y nada menos!", exclama el socialista, que añade que el tema "no pasaría de algún comentario de café de iurisconsultos si no fuera porque expresa todo un comportamiento político de mucho más calado y que debería hacer pensar".
Así, indica que la manera en que se está llevando esta modificación reglamentaria es un "atentado a la institución parlamentaria, ante una fractura del Estado de Derecho" y se pregunta "qué están haciendo los servicios jurídicos de la Cámara ante la situación".
No obstante, va más allá y dice que sobre todo, estamos "ante la prueba del nueve de que la 'trama Grtel' no es cosa de dos o tres corruptos", sino que "es la consecuencia de una estructura de poder despótica que actúa en la sociedad y en las instituciones sin límite y freno". "¡Hasta cuando! La sociedad madrileña tiene la palabra", apostilla.
En opinión de Aranda, "cuando un partido político lleva tantos años ejerciendo el poder en las instituciones y en la sociedad sin control alguno sucede que no tiene límites y si el Derecho o los procedimientos de las instituciones le coarta sus pretensiones se pone 'por montera' esas instituciones y el Estado de Derecho y actúa, 'sin complejos', a su antojo y capricho".
En esta línea, indica que "puede que el fin que se persiga sea bueno" y "que los diputados expulsados no deberían pasar al Grupo Mixto y beneficiarse de las prebendas que conlleva".
"Pero no debemos olvidar que en el Estado de Derecho el fin no justifica los medios. Lo que tendría que haber hecho el PP es impulsar la reforma reglamentaria hace tiempo, que oportunidad y reclamación para ello hubo, en el 'Caso Tamayo y Sáez', pero entonces ¡lástima! No interesaba al PP", concluye el parlamentario.
