Asociación Madrileña de Pediatría defiende reducir horarios en centros de salud por falta de personal y conciliación

Pediatra auscultando a un paciente.
GOBIERNO DE NAVARRA - Archivo
Publicado: jueves, 24 enero 2019 14:30

MADRID, 24 Ene. (EUROPA PRESS) -

La Asociación Madrileña de Pediatría de Atención Primaria ha defendido la reducción de los horarios de las consultas en los centros de salud ante la situación de "falta de profesionales" y la "imposible" conciliación familiar y laboral, según ha informado el colectivo en un comunicado.

Respecto al plan piloto que se está aplicando en 14 centros de salud en los que los horarios de atención terminan a las 18.30 horas, manteniéndose las urgencias hasta las 21.00 horas, los pediatras han justificado esta "necesidad de reducción", aduciendo la "falta de profesionales" en la Atención Primaria por carecer de una "oferta laboral atractiva".

De esta forma, han afirmado que cada año es más difícil "cubrir plazas vacantes o encontrar suplentes", al tiempo que han asegurado que están "seriamente comprometidos" con una "sanidad pública, universal y gratuita" y en contra de "cualquier intento de privatización".

Desde este colectivo han informado de que los motivos son "diversos" pero han destacado las jornadas laborales hasta las 21.00 horas, que hacen "imposible" la conciliación familiar.

Los pediatras de Atención Primaria han explicado que en otras Comunidad Autónomas y otros países los horarios "no son tan amplios", y eso no conlleva unos "peores" resultados. Así, han afirmado que se trata de "reorganización horaria y no recortes".

"Podemos entender la inquietud de ciertos colectivos o plataformas que se oponen a estas modificaciones, pero decir que es un plan para privatizar la sanidad es simplemente faltar a la verdad", han aseverado.

Por último, han señalado en el comunicado que también consideran importantes otras medidas como "el aumento de presupuesto para la Atención Primaria, la estabilidad laboral o el aumento de las plazas MIR", pero la modificación horaria se trata de una "necesidad real" para mantener "una sanidad de calidad, universal y gratuita".