ALCOBENDAS, 20 Mar. (EUROPA PRESS) -
El Ayuntamiento de Alcobendas ha instalado 34 contenedores soterrados en nueve zonas del distrito Centro, que sustituyen a los contenedores convencionales y que se suman a los 56 puntos con los que cuenta la localidad para la recogida de basura orgánica, cartón, envases y vidrios.
Estos nueve puntos de contenedores soterrados sustituyen a antiguos contenedores en superficie y están ubicados en el mismo emplazamiento que los antiguos para mayor comodidad de los vecinos. Hay seis islas soterradas dotadas cada una con dos contenedores para basura orgánica, uno para papel y cartón, otro para envases y otro para vidrio, en los números 26 y 48 de la avenida de España, Doctor Casimiro Morcillo, 1, Pintor Velázquez, 38, Pintor Sorolla, 19 y Paseo de la Chopera, 79.
Además, se han instalado tres puntos más, que suman otros cuatro contenedores en total, dedicados exclusivamente a la recogida de residuos en los números 44 y 50 de la avenida de España y en Pintor Velázquez, 7.
La inversión para la instalación de estos nueve puntos con 34 contenedores soterrados ha ascendido a 546.877 euros, de los que el 50% ha sido financiado a través de los fondos Urban de la Unión Europea.
El Ayuntamiento ha hecho un llamamiento a todos los vecinos para convertir Alcobendas en un ciudad más respetuosa con el medio ambiente y el reciclaje. Por ello, ha pedido a los ciudadanos que "separen los distintos residuos antes de depositarlos en cada contenedor: en el naranja, residuos orgánicos; en el azul, papel y cartón; en el amarillo, bricks, latas y plásticos; y en el verde, vidrio".
Asimismo, ha solicitado que "todos los residuos se introduzcan en el correspondiente contenedor para evitar que el entorno de los mismos se llene de bolsas", ya que a su juicio no hacerlo supone "una actitud que malogra el esfuerzo de los vecinos que realizan una separación y depósito de los residuos de manera adecuada".
Desde el Consistorio han recalcado que las ventajas del sistema de soterramiento de contenedores son numerosas: cuentan con más capacidad, hasta 4.000 litros cada uno, ocupan menos espacio en la vía pública que los situados en la superficie, por lo que reducen el impacto urbanístico y medioambiental, y son más limpios y con menos olores.
Además, son más accesibles y funcionales ya que al tener la tapa a sólo un metro de altura pueden ser utilizados por niños y personas con discapacidad. También, al tener mayor capacidad, los gastos de recogida disminuyen y no suelen necesitar reparaciones y, en consecuencia, los gastos de mantenimiento son menores.
