MADRID, 21 Ene. (EUROPA PRESS) -
La presidenta de la Comunidad de Madrid ha situado como su jefe de Gabinete al que fuera portavoz y secretario de Estado de Comunicación en la etapa de José María Aznar, Miguel Ángel Rodríguez, y Ciudadanos expresa, en el seno del Consejo de Gobierno, su "disconformidad" con dicho nombramiento.
"Le he nombrado porque para mis mensajes, para mi agenda, para mi trabajo, creo que es el que va a hacer el mejor papel en estos momentos", ha defendido la dirigente madrileña, en rueda de prensa, en la Real Casa de Correos.
Su vicepresidente, Ignacio Aguado, que se encontraba a su lado, ha recordado que en el acuerdo de investidura se recogió que los nombramientos dependientes de las áreas de Gobierno corresponderían en exclusiva a cada formación que las liderase.
"Lo que sí hemos hecho en Consejo de Gobierno ha sido expresar nuestra disconformidad con el nombramiento, dentro de nuestro derecho a expresarlo pero respetamos profundamente el nombramiento", ha lanzado a continuación.
Rodríguez ya asesoró a la dirigente madrileña durante la campaña electoral de las autonómicas en mayo y durante estos meses de Gobierno el consultor político no se ha desvinculado de la presidenta. Han sido varias las polémicas que ha protagonizado por sus mensajes a través de la red social Twitter.
En concreto, tachó de "desleal" a Aguado por su posicionamiento con Avalmadrid y aludió a un supuesto contrato de 102.000 euros que "le dieron" a su padre "por la cara" en la Asamblea de Madrid. Desde el partido 'naranja' aseguraron que dichas declaraciones eran "impresentables" y que no tenían "ningún tipo de fundamento".
Además, ha sido especialmente duro con la actual Dirección de Radio Televisión Madrid. Ha criticado a miembros del Comité de Empresa y ha escrito en tono irónico que el hecho de que se emitiese una noticia positiva en la cadena sobre Ayuso era consecuencia de que tanto el director general como el jefe de Informativos estaban "de vacaciones".
Una de sus últimas declaraciones controvertidas fueron dirigidas contra la portavoz de Vox en la Cámara autonómica, Rocío Monasterio, y su marido y portavoz de esta formación en el Congreso, Iván Espinosa de los Monteros. Ante una información que aludía a que estos no estaban al día de los pagos en su comunidad de vecinos, el asesor lanzó un "jódete" y le afeó su posición respecto a la comisión de Avalmadrid.
Al paso de este rifirrafe tuvo que salir la presidenta madrileña. "Creo que somos adultos y yo no puedo ir a nadie a quitarle el tuit o decirle a nadie cómo tiene que utilizar sus redes sociales", declaró ante los medios de comunicación, después de asegurar que ella siempre había rechazado comentar las publicaciones sobre temas personas de Vox.
