MADRID, 15 Feb. (EUROPA PRESS) -
El diputado regional socialista y miembro de la Comité Federal del PSOE, José Cepeda, ha abogado este domingo por que el PSM acabe "con la mayor dosis de sensatez posible" con la "película" que está viviendo en los últimos días para centrarse en los madrileños.
El diputado ha hecho estas declaraciones después de que este domingo, tres días después de que la Comisión Ejecutiva Federal (CEF) decidiera disolver el PSM y crear una gestora, la parlamentaria Amparo Valcarce haya pedido primarias para presentar su candidatura a la Presidencia regional, algo a lo que ha contestado el presidente de la Gestora, Rafael Simancas, recordándole que el proceso para elegir candidato ya está decidido.
"Pediría que por encima de todo esta película que estamos viviendo últimamente en el PSM acabe con la mayor dosis de sensatez posible. No estoy interesado en ninguna mala película, ni en 'Lo que el viento se llevó', ni en 'Sisí emperatriz', ni en 'Un día en las carreras' de los hermanos Marx; sino en que el PSOE vuelva a ofrecer soluciones a los problemas que hoy tienen los madrileños", ha destacado el socialista, en declaraciones a Europa Press.
A su juicio, en un momento en que el PP "se está cayendo a cachos" y "no tiene un proyecto de futuro, ideas, ni personas con las que liderar absolutamente nada y ya están acabados, el PSOE debería trabajar en pensar con sensatez y sentido común en nuevos proyectos".
"Los madrileños no están interesados en absoluto en ninguna película pretérita", ha sostenido para asegurar que los ciudadanos quieren una película "moderna" por encima de hombres y alguien que les resuelva sus problemas.
El dirigente socialista ha indicado que es "bastante poco edificante" lo que se está viendo en el PSM y ha señalado que él "pediría que se acaben estos procesos abiertos", y volver a "hablar de cómo resolver los problemas de los madrileños", que están "deseosos de ver en el PSM una referencia incontestable y una alternativa a una derecha decrépita".
Además, ha destacado que "los partidos políticos no son de nadie", sino un instrumento de representación de los ciudadanos, que son "sus verdaderos dueños".
