Condenada a doce años de cárcel una mujer por emplear el 'Beso del Sueño' para robar a sus víctimas

MADRID 13 May. (EUROPA PRESS) -

La Audiencia Provincial de Madrid ha condenado a doce años de prisión a una mujer que empleaba el denominado método de robo el 'Beso del Sueño' para narcotizar a sus víctimas y robarlas.

En la sentencia, a la que tuvo acceso Europa Press, la Sección Segunda impone doce años de prisión a Rosa María M.F. por delitos de robo con violencia, detención ilegal y lesiones alevosas. Además, deberá indemnizar 1.750 euros a una de sus víctimas.

La procesada empleaba el llamado 'Beso del Sueño' para cometer sus robos. Esta mecánica consiste en echar un fármaco en la copa de una persona para sedarle y perder de este modo su resistencia a un ataque.

La Sección basa su acusación en la declaración de una de las víctimas de la condenada que en el mismo juicio identificó a ésta como su agresora.

La resolución relata que la condenada acudió el 2 de marzo de 2007 al Hotel Claridge, situado en la Plaza de Conde de Casal, donde había quedado con la víctima en una habitación. Tras cambiarse de ropa, preparó una bebida en la que vertió una cantidad de haloperidol, lo que provocó que el hombre quedara inconsciente.

Así, la procesada le ató en una silla y dejó entrar a otra persona en la habitación. Una vez dentro, los dos le golpearon brutalmente y le robaron sus efectos, siendo liberado dos horas después por un empleado del hotel.

En la vista oral, Rosa María negó que fuera la persona que drogó a una de las víctimas para robarle, así como que hubiera usurpado la identidad de una mujer para coger una habitación en el hotel en que se produjeron los hechos.

A preguntas sobre por qué se encontró documentación de otras personas en su domicilio, la mujer alegó que su entonces pareja se dedicaba a la compra-venta de vehículos y, por esta razón, tenía bastante documentación de diversas personas.

Frente a su versión, la víctima relató que conocía a la acusada de Valladolid, donde solía quedar en una consulta de masajes eróticos. Además, ha contado que el día de los hechos se citó con ella en un hotel para mantener un encuentro sexual.

"Me ataron y me dieron patadas. No sé por qué lo hicieron, ya que les hubiera dado todo lo que tenía", indicó el agredido, quien ha recalcado que los médicos le comentaron que estuvo a punto de morir.