Llegaron a utilizar un cuchillo eléctrico con el que casi seccionaron un brazo a la víctima
MADRID, 6 May. (EUROPA PRESS) -
Agentes del Cuerpo Nacional de Policía han detenido a tres ciudadanos chinos acusados de extorsiones a compatriotas suyos en el distrito de Usera. La Jefatura Superior de Policía informó hoy que sus violentos métodos habían generado una importante alarma social entre el vecindario y los comerciantes de la zona. Estos individuos están acusados también de varios apuñalamientos en los que provocaron lesiones graves a las víctimas.
Funcionarios del Grupo Primero de Policía Judicial de Usera-Villaverde y del Grupo Quinto de Extranjería y Documentación, que colaboraron con los primeros dada la especialidad del caso, han llevado a cabo las investigaciones. Estas se iniciaron a primeros del pasado mes de marzo, tras una reyerta en una pensión del distrito.
A pesar del secretismo de las víctimas, generado por el miedo a las represalias con que son amenazadas, los policías averiguaron que el incidente había sido motivado por la negativa de los extorsionados a pagar un canon de protección para evitar daños diversos en sus personas y negocios. Tras la denuncia, los presuntos autores y víctimas fueron citados en el juzgado. Estos últimos recibieron todo tipo de amenazas de los primeros, que querían evitar a toda costa que los denunciantes corroboraran las extorsiones que sufrían desde hacía tiempo.
CUCHILLO ELÉCTRICO
Así las cosas, abandonaron las dependencias judiciales sin declarar y acudieron a denunciar a la Comisaría de Usera por este hecho. Según la Jefatura Superior de Policía, un nuevo y grave suceso tuvo lugar el 4 de abril. Varios jóvenes chinos acudieron a una vivienda de la calle de Marcelo Usera y llamaron por el interfono a un ciudadano.
Este bajó y, tras una breve entrevista, fue agredido por los recién llegados. Estos exhibieron armas blancas y de fuego, y su violencia fue tal que incluso llegaron a utilizar un cuchillo eléctrico, con el que casi seccionaron, a la altura del hombro, el brazo de la víctima.
En este punto, y cuando ya habían averiguado los investigadores la identidad de alguno de los delincuentes, tuvieron conocimiento de una nueva extorsión. Los sospechosos exigían 20.000 euros a un compatriota con la amenaza de graves daños a sus familiares y de quemarle el negocio, un establecimiento de comida, si no accedía al pago.
Los policías establecieron unas medidas de vigilancia en torno a este local y el miércoles pasado, día 3, a última hora de la tarde advirtieron la llegada de tres jóvenes chinos, uno de ellos sospechoso de los delitos anteriores. Los delincuentes adoptaron medidas de seguridad, penetraron en el establecimiento y se dirigieron al propietario, momento en que los agentes decidieron intervenir.
El asustado propietario tenía en sus manos un sobre con 20.000 euros que se disponía a dar a los recién llegados. Los detenidos son Yuan W., de 19 años, con antecedentes por delitos contra la propiedad intelectual; Xiao Z.CH., de la misma edad que el anterior, y Jie Z., de 18 años, los tres naturales de China y han sido identificados por las víctimas de las extorsiones y lesiones graves.
Estaban regularizados en España y sus actuaciones habían generado gran alarma entre los habitantes del distrito de Usera, donde llevaban a cabo las extorsiones. El comportamiento exhibido con las víctimas de sus fechorías en un juzgado madrileño demuestra el sentimiento de impunidad con que actuaban, según la Jefatura Superior de Policía. Los tres individuos pasaron ayer a disposición judicial.
