MADRID, 16 Abr. (EUROPA PRESS) -
La candidata de Vox a la Presidencia de la Comunidad de Madrid, Rocío Monasterio, ha cargado este viernes contra la Ley de protección a la infancia y a la adolescencia que permitirá que les digan a los niños que "la familia tradicional es la enemiga".
"Lo que ocurre es que, con esa ley, Pablo Iglesias, Irene Montero e Ione Belarra volvían a entrar en los colegios a decirles a los niños que no tiene que escuchar lo que le dicen sus padres y que la familia tradicional es la enemiga porque es patriarcal", ha señalado Monasterio en un acto en Alcorcón, en el que ha participado junto al presidente de Vox, Santiago Abascal.
Así, tanto Abascal como Monasterio se han mostrado en contra de una ley que "pretende continuar con el adoctrinamiento en los colegios" y se han vuelto a comprometer a cumplir "la función social de Vox" que es impedir que "el comunismo asalte las instituciones de la Comunidad de Madrid y acabar con las políticas de la izquierda".
"Aparentemente, por lo que se ve en los titulares, es para proteger a los niños. Y nosotros habríamos apoyado que hubiera un plazo más amplio para denunciar abusos, para que se protegiera a los menores que necesitan ser protegidos", ha indicado la candidata.
Sin embargo, ha criticado que les dicen a los niños que por nacer varón son "machistas o pueden tener tentaciones de ser violento" y a las niñas que son "débiles", según ha explicado.
Monasterio ha vuelto a insistir en la importancia de incentivar la natalidad y proteger a las familias, una idea que ha sido refrendada por el presidente de Vox. "¿Pero cómo pudo votar el PP a favor de esta herencia envenenada que dejó Pablo Iglesias?", ha apostillado Abascal en relación a esta ley.
Al hilo, ha dicho que si el líder del PP, Pablo Casado, está dispuesto a que el exvicepresidente Pablo Iglesias "eduque a sus hijos, él sabrá", pero en que Vox no está dispuesto a "que pongan un solo dedo y perturben la inocencia de nuestros hijos a los que no va a querer nadie más que sus propias familias".
Por ello, ha señalado que el 4 de mayo no se juega solamente una medida económica u otra sino "el principio del fin de la libertad". "Nos jugamos el asalto comunista a las instituciones. Nos jugamos que Pablo Iglesias se tenga que cortar el moño y abandonar la política para siempre", ha concluido Abascal.
