MADRID, 26 Jun. (EUROPA PRESS) -
La presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, y el presidente de Caja Madrid, Miguel Blesa, presentaron hoy el nuevo Plan Impulsa Express, dotado con 75 millones de euros, y que facilitará a los autónomos y a las pequeñas y medianas empresas agilizar en un plazo máximo de una semana los plazos para financiar el circulante de éstos.
La entidad financiera madrileña se encargará de canalizar primero las operaciones mientras que Avalmadrid será el que las tramitará en un plazo máximo de una semana, con el objetivo, según indicó Aguirre, de realizar el mayor número de operaciones posible y por tanto, que la liquidez llegue a las empresas.
Los 75 millones que tiene el plan para este año irán dirigidos a préstamos avalados de los que se beneficiarán unas 1.500 pymes y autónomos madrileños, con una contribución al empleo de más de 6.000 puestos de trabajo en toda la Comunidad de Madrid. Cada una de las empresas podrá recibir un importe máximo de 60.000 euros y 30.000 en el caso de los autónomos.
Aguirre indicó que el nuevo Plan consta de tres productos específicos: financiación de capital circulante coyuntural (pólizas de crédito) y estructural (préstamos de tesorería) y "refinanciación de corto a largo plazo".
Aguirre reiteró, consciente de que así lo hacía, la importancia que tienen estos planes para ayudar a las pymes, porque aunque en Madrid estén situadas muchas sedes de las grandes empresas, el 97 por ciento del tejido empresarial lo conforman las pequeñas y medianas compañías, "que además generan el 70 por ciento del empleo en la Comunidad".
Por ello, aprovechó el acto para anunciar que ampliará con 50 millones de euros más el Plan Impulse Pyme, con 75 millones iniciales también, la primera medida que se introdujo para paliar el problema de la financiación, tres meses por delante que la del Instituto de Crédito Oficial, ICO Circulante.
Precisamente, la presidenta señaló que tienen constancia de que a algunas empresas no les están llegando las ayudas del Gobierno central a través del ICO, que "no tienen las condiciones financieras necesarias", por lo que apuntó que la Comunidad interviene con estos importes económicos para ayudarles a afrontar la crisis.
Estas ayudas forman parte de los 10.000 millones de euros que ha puesto a disposición el Gobierno regional para las pymes en este sentido. Aquí, la presidenta quiso recordar que está cantidad corresponde a un billón de euros, y estuvo un rato intentado averiguar la cantidad correspondiente en millones. "Hay que traducirlo porque la gente no lo sabe", indicó.
Todo se enmarcar en el plan de reactivación económica que presentó la presidenta regional ante la Asamblea de Madrid el pasado 29 de abril, durante el Pleno Monográfico sobre la crisis económica. Engloba 50 medidas de índole tributario, económico y de reactivación de empleo.
NO HAY RESTRICCIÓN
Por otro lado, el presidente de Caja Madrid, Miguel Blesa, mostró su satisfacción por haber llegado a este acuerdo y aprovechó la ocasión para explicar que las entidades financieras no están restringiendo tanto como se dice los préstamos y ayudas a las pequeñas y medianas empresas.
"El sector financiero no ha cerrado las puertas", apuntó Blesa, quien explicó que en 2008 tuvieron 321.000 solicitudes de préstamo, un 22 por ciento menos respecto a 2007, y que, de éstos, aceptaron el 86 por ciento del total, lo que significa 2 puntos menos que el año anterior. "No hay, por tanto, tampoco esa restricción de la que se habla", subrayó.
El presidente de la Cámara de Comercio, Salvador Santos Campano, también se refirió a la situación financiera actual y agradeció a la presidenta de la Comunidad que esté apoyando a los empresarios en momentos tan complicados. De hecho, criticó al Gobierno central asegurando que ellos no ven "brotes verdes por ninguna parte pero sí el brote de 'esperanza'" para salir de la crisis con la ayuda de Aguirre.
El responsable de CEIM, Arturo Fernández, se encargo de pedir a la Comunidad que ampliara las ayudas del Plan Impulsa Pymes, cuyos fondos "ya se han acabado, lo cual significa que va en buen camino", y reiteró la necesidad de cambiar algunos planteamientos en el mercado de trabajo, además de austeridad en el gasto público y la bajada de impuestos.
