MADRID, 26 Jul. (EUROPA PRESS) -
La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha solicitado a la marca automovilística Opel una solución para los usuarios del sistema de conectividad y ayuda a la conducción OnStar, que dejará de funcionar a partir del 31 de diciembre de 2020, "sin que la marca haya ofrecido de momento una alternativa para sus clientes".
Tal como ha señalado la OCU, tras la venta de la división europea de Opel por parte de General Motors al Grupo PSA, este lanzará una nueva tecnología para los nuevos coches de la marca, por lo que se suprimirá el servicio "de manera unilateral".
La organización ha recordado que, en caso de que Opel no plantee una solución satisfactoria a este problema, los usuarios afectados podrían pedir una indemnización por la suspensión del servicio.
Por su parte, fuentes de Opel han asegurado a Europa Press que la marca está tramitando "cada caso específico" para dar una solución a los usuarios.
Entre otros motivos de esta petición, OCU ha señalado que el servicio OnStar supone una funcionalidad diferenciadora respecto de otras marcas, por lo que "fue seguramente lo que declinó a muchos de los consumidos a adquirir ese vehículo".
Asimismo, la decisión de elegir disponer como opción ese sistema en los modelos que no lo traían de serie ascendía hasta 700 euros. Además, "muchos usuarios pudieron decantarse por las versiones más caras de los modelos Opel para así disponer del sistema, lo que supone un desembolso extra de miles de euros".
La decisión unilateral de la marca deja, según la OCU, en una posición "desventajosa" a los consumidores y las posibilidades de reventa en segunda mano de los propietarios de los vehículos se deprecian "considerablemente", no solo a partir de 2021, sino desde que la firma anunció que el servicio dejará de funcionar.
