BARCELONA, 4 Sep. (EUROPA PRESS) -
La multinacional de componentes de automoción Tyco informó hoy al comité de empresa de su intención de cerrar su fábrica de Berga (Barcelona), vender la de Valls (Tarragona) y despedir plantilla en Montcada i Reixac (Barcelona) y en las oficinas centrales de Barcelona, medidas que afectan a más de 300 trabajadores, informaron fuentes sindicales.
La fábrica de Berga --de inyección de plásticos-- emplea a 121 personas, y la compañía estadounidense argumenta su cierre por cuestiones económicas. Fuentes de UGT, sindicato mayoritario en la empresa, reconocieron a Europa Press la "fuerte competencia" de costes de este segmento, donde India y China son los principales polos de atracción.
El responsable de Política Industrial de la Federación del Metal de CC.OO., Pere Colell, también apuntó a la deslocalización, y recordó que se trata de una fábrica "nueva" --de alrededor del 2000-- y que en su momento "recibió" ayudas de la administración.
La planta de Valls --de cableado-- cuenta con 112 trabajadores, y está en venta porque el cableado ha dejado de ser un sector estratégico para Tyco. Tiene las cuentas saneadas e incluso prevé contrataciones los próximos meses, pero todavía no hay comprador conocido.
La reducción de plantilla en Montcada, cifrada en 69 de los 389 trabajadores totales, responde al objetivo de Tyco de potenciar las instalaciones como centro tecnológico. Las oficinas de Barcelona, donde la compañía pretende prescindir de 23 personas de un total de 132, son la sede de la empresa en España.
Tanto los despidos de Montcada como los de Barcelona están ligados al cierre de Berga. Entre los tres, suman 213 puestos de trabajo que se perderán, si se cumplen las previsiones de la empresa, en 2009.
Desde la Federación del Metal de UGT, Narciso Riera calificó de "bueno" que la empresa no haya presionado con una presentación inmediata de Expediente de Regulación de Empleo (ERE) y una "fecha límite". De momento Tyco propone realizar la reestructuración a lo largo de 2009, con un 60% de los despidos entre enero y mayo y el resto hasta fin de año.
Con todo, Riera señaló que el comité de empresa mirará "con lupa" la justificación de cada uno de los despidos planteados hoy por la empresa, que actualmente emplea a 754 personas en Catalunya, porque su plan inicial afecta a un 28,2% de la plantilla.
