MURCIA, 5 Abr. (EUROPA PRESS) -
El Colegio de Médicos ha tenido conocimiento de la falsificación de recetas y la presión que algunos usuarios del Servicio Murciano de Salud ejercen sobre los médicos de familia para la obtención de las prescripciones del fármaco Rivotril. En algún caso, "los profesionales han llegado a sufrir agresiones por negarse a realizarlas".
Para garantizar la buena práctica de la profesión y velando por la seguridad de los médicos que ejercen en el ámbito de Atención Primaria, donde los medios de vigilancia y protección están más limitados, el Colegio se ha puesto en contacto con las autoridades sanitarias competentes para que adopten medidas que puedan evitar agresiones a los profesionales.
Desde el Colegio de Médicos "queremos resaltar que la protección del personal sanitario respecto a los riesgos laborales y agresiones es responsabilidad directa del empleador, en este caso, el Servicio Murciano de Salud y debe ser la Administración la que procure las medidas preventivas necesarias".
Exige que, en todos los puntos de asistencia sanitaria, especialmente en los de más riesgo, "exista una protección de los profesionales frente a posibles agresiones".
