MURCIA, 19 Abr. (EUROPA PRESS) -
Fundación Ingenio trabaja en un decálogo para un ecologismo más inclusivo, ya que denuncia que desde ciertos sectores polarizados se está difundiendo generalizaciones excesivas que "degradan a todo un sector que en su gran mayoría es honrado y trabajador".
La idea, dice Natalia Corbalán, directora de Fundación Ingenio, es "promover un ecologismo más sensato, razonable y moderado, en definitiva, más inclusivo". Por ello, se está trabajando en un decálogo que "rompa con la visión monolítica de ciertos sectores del ecologismo".
"Vertidos de nitratos, prácticas contaminantes, uso indiscriminado del agua, agroindustria que solo ofrece trabajo precario o derroche de recursos son tan solo algunos de los mantras que se le asignan injustamente al sector agrario", según Corbalán.
Desde Fundación Ingenio se trabaja para" romper con los falsos mitos que existen sobre la agricultura, pero con información veraz, contrastada, con informes y opiniones de expertos".
Y es que, advierte, "desde ciertos sectores un tanto polarizados se han propagado generalizaciones excesivas acerca de la utilización de pozos ilegales, demonizando a todo un sector por las acciones de unos cuantos cuando en realidad en su gran mayoría es honrado, decente y trabajador".
Paradójicamente, a pesar de que Fundación Ingenio siempre defenderá la legalidad y denunciará estos casos, la realidad expresada por expertos y catedráticos es que "la extracción mediante pozos de agua del cuaternario sería la solución más eficaz a corto y largo plazo para evitar la entrada de nitratos al Mar Menor".
VERTIDOS DE NITRATOS: PRÁCTICAS DEL PASADO
A ese respecto, uno de los temas más polémicos que aborda el Decálogo es el de los nitratos. "Los vertidos de nitratos se corresponden con actuaciones del pasado que han quedado fuera de la forma de proceder de la conciencia agrícola del Campo de Cartagena", señala Corbalán.
Al mismo tiempo, la directora de Fundación Ingenio recuerda que las noticias que a veces aparecen sobre vertidos de nitratos al Mar Menor "no proceden de la agricultura actual". "Se filtraron en el subsuelo hace décadas, quedando atrapados en el acuífero cuaternario y su recorrido hasta el Mar Menor es de décadas", puntualiza.
En ese sentido, Corbalán apunta que la única solución para frenar estos vertidos es la "gestión ordenada" del acuífero cuaternario, "algo que llevamos reclamando a las administraciones desde hace años y que estaban aprobadas en el Plan Vertido Cero". "No cesaremos nuestro reclamo para que el Gobierno ponga en marcha estas medidas", apostilla.
Fertirrigación, sondas de humedad o sistemas intensivos de plantación son algunas de las innovaciones que el sector agrario ha introducido en el Campo de Cartagena. "Es un modelo eficiente y sostenible que se caracteriza por su mayor eficiencia en el uso del agua y de los fertilizantes", asegura Natalia.
Por tanto, la directora de Fundación Ingenio recuerda que en la actualidad en el Campo de Cartagena se desarrolla una agricultura de precisión mediante riego localizado que supera el 95% de las explotaciones. O por ejemplo con respecto a la optimización del agua. "El avance tecnológico que suponen las TICs le ha permitido hacer un reparto equitativo y transparente del agua", indica.
El Decálogo se presentará en las próximas semanas y se basa "no solo en desmontar formulaciones falsas o incorrectas, sino también en aportar datos veraces, conocimiento y opiniones cualificadas para ampliar el espectro del ecologismo", indica. "Los agricultores somos los más interesados en cuidar, proteger y preservar el medioambiente", finaliza Natalia Corbalán.
