MURCIA, 4 Feb. (EUROPA PRESS) -
La joven que mantuvo una relación sentimental "esporádica" con el acusado de matar a su madre y su hermano en la vivienda familia de Las Torres de Cotillas, en marzo de 2018, ha confirmado que en la noche y madrugada de los hechos estuvo con el supuesto parricida y que "lo vio bien", como era él, "ni tranquilo ni nervioso".
A pesar que esa relación "esporádica" que mantenía con el acusado no continúa, la testigo ha reconocido que "son muy amigos". Después de participar en la procesión de San Antolín, la joven llegó a casa sobre la 1.30 de la madrugada y, después de ducharse, el acusado le esperó debajo de su casa, como otras muchas veces que quedaban para verse.
Ella bajó en pijama y después se fueron a un conocido pub de Puente Tocinos, aunque ella se quedó en el coche. Allí, según relata, estuvieron poco tiempo. Después repostaron en una gasolinera en las inmediaciones de la avenida de la Fama para, a continuación, ir a casa del acusado, en donde ella esperó fuera de la vivienda, durante poco tiempo.
Entre las cosas que recuerda la joven de aquella noche y madrugada, es que el acusado tenía una herida cicatrizada "aunque no recuerda en qué mano", pero sí la ropa que llevaba. No recuerda que, delante de ella, el acusado consumiera ninguna sustancia estupefaciente "tipo cocaína", porque "él sabe que lo detesto".
La joven también recuerda que, en el trayecto de la casa del acusado a la suya, el teléfono de móvil de él se quedó sin batería mientras mantenía una conversación. "Al rato" de llegar a su casa, la joven volvió a hablar con el acusado por mensajería electrónica y no supo nada de él hasta al día siguiente en el que se enteró de los hechos.
