MURCIA, 4 Feb. (EUROPA PRESS) -
El secretario ejecutivo de Agricultura, Agua y Medio Ambiente del Partido popular, Jesús Cano, ha manifestado este jueves su "enorme preocupación" tras conocer las palabras del presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, apelando a acabar de "forma gradual" con el trasvase Tajo-Segura. Así, ha advertido que "un gobierno de Pedro Sánchez en Madrid sería lo peor que puede pasarle a la Región de Murcia en materia de agua".
Cano considera estas manifestaciones como una "amenaza contundente a la continuidad de la principal fuente de abastecimiento de agua para el Levante español, de la que se benefician 2,5 millones de españoles".
"Los socialistas se han destapado y ya revelan de forma clara que su política de agua pasa por la liquidación del trasvase", ha dicho Cano, quien ha lamentado que García-Page "denoste la Ley del Memorandun que consiguió cerrar la guerra del agua y poner de acuerdo a cinco comunidades y al Gobierno de España".
Por ello, le ha tendido la mano "para trabajar junto en un Plan Hidrológico Nacional que, sin líneas rojas, solucione de una vez por todas el déficit hídrico de la Región de Murcia".
El secretario ejecutivo de Agricultura, Agua y Medio Ambiente ha señalado que "el único planteamiento razonable, moderado y gradual, además de ser la única alternativa posible, al déficit hídrico de la Cuenca del Segura y a la sequía que está padeciendo la cabecera del Tajo, es apostar por nueva transferencia de otra Cuenca y por otro trasvase" y ha añadido que "las desaladoras son una medida paliativa y coyuntural con una solución definitiva".
Cano valora como "grave" la actitud del secretario general de los socialistas murcianos, Rafael García Tovar, "más preocupado, en estos momentos, por el tacticismo político en Madrid para satisfacer sus aspiraciones personales que en defender los intereses generales de todos los murcianos".
Por ello, le ha pedido a Tovar que "reaccione y haga ver a su compañero socialista de Castilla- La Mancha que el trasvase Tajo-Segura es vital para la Región, una infraestructura que da de comer a más de 100.000 familias, abastece a 2.500.000 de españoles, y aporta empleo y riqueza para todo el país. Su cierre supondría destrozar la economía no sólo del levante español, sino que además pondría en jaque la economía de todo el país", ha añadido.
