MADRID, 25 Sep. (EUROPA PRESS) -
La acusación popular que representa a la Organización Impulsora de Discapacitados (OID) en la investigación del siniestro del avión de Spanair ha solicitado al juez Javier Pérez que testifiquen los dos técnicos de mantenimiento que revisaron la aeronave accidentada tras abortar el primer despegue, así como el vídeo de AENA que muestra las imágenes del avión en el momento en que se realizó el repostaje y la revisión, informaron hoy a Europa Press fuentes jurídicas.
El motivo de las testificales se debe a que el informe preeliminar de la Comisión de Investigación de Accidentes e Incidentes de Aviación Civil (CIAIAC) señala que los técnicos desconectaron el piloto del RAT, que alerta de la alta temperatura, lo que anuló un chivato que avisa si el piloto ha activado los 'flaps' y 'slats' de las alas que permiten que el avión despegue al dar sustentación al aparato.
Según el informe, los técnicos quitaron el piloto sin darse cuenta de que el avión estaba en modo vuelo. La aeronave tradujo el cambio de parámetros pensando que estaba en el aire, pero en realidad estaba en tierra. Ello anuló el mecanismo que alerta de si el piloto ha activado los flaps y slats de las alas.
Según las fuentes consultadas, el hecho de quitar el fusible de la temperatura interaccionó con los sistemas de configuración de los 'flaps' y 'slats', así como el sistema de avisos que alertan si hay fallos en el anterior.
Esas mismas fuentes indican que existen contradicciones entre lo que declararon los técnicos ante la Guardia y Civil con lo manifestado con una de las supervivientes de la catástrofe, que iba en uno de los asientos de la clase 'Business'. En su declaración, los técnicos mantuvieron que sólo uno de ellos subió al avión, mientras que la pasajera que los vio sostiene que subieron los dos.
Si la versión de los técnicos se corresponde con la realidad, sería imposible contradecir sus manifestaciones con las del piloto Antonio García Luna y su copiloto, puesto que fallecieron en el impacto. El vídeo de AENA que captó las imágenes del avión tras abortar el primer despegue sería clave para dilucidar estas contradicciones.
