LAS PALMAS DE GRAN CANARIA, 12 Dic. (EUROPA PRESS) -
El portavoz de Exteriores del PP, Gustavo de Arístegui, ha indicado que Canarias "es lugar de paso" del terrorismo, por lo que ha aconsejado "no bajar la guardia" aunque aseguró que "tampoco hay que obsesionarse".
"Tampoco hay que obsesionarse porque por fin las autoridades se han dado cuenta de la seriedad de la situación y los canarios no deben salir por la mañana pensando que les puede pasar cualquier cosa. Mas que como objetivo, Canarias es lugar de paso o puerta de entrada porque los objetivos prioritarios de un terrorista son las capitales", subrayó.
De todos modos, señaló que los canarios deben estar "razonablemente tranquilos", sin embargo apuntó que "no se puede ni se debe ignorar el riesgo".
En este sentido, puntualizó que no se trata de crear alarma entre la población sino de que haya una atención suficiente a este tema. "No se trata de generar alarma entre la población sino de que haya un nivel suficiente de atención sobre esos riesgos potenciales porque es la obligación de los poderes públicos, adoptar medidas preventivas eficaces", matizó en una entrevista al periódico La Provincia y recogida por Europa Press.
Arístegui hace referencia a esta situación del archipiélago canario porque recordó que los temores sobre la situación del Magreb y del Sahel (zona africana que comienza donde termina el Sáhara) son "muy fundados", por lo que consideró que "ignorarlos sería extraordinariamente irresponsable".
"No entender que estamos ante uno de los mayores riesgos del mundo sería ignorar lo que sucede, sobre todo, en la zona del Sahel donde hay tres tipos de terrorismo: las células propias de Al Qaeda, el terrorismo yihadista y los grupos de bandidos y criminales que cometen toda clase de tráfico de drogas, de seres humanos", apuntilló.
Para el diputado 'popular' no todas las costas de África Occidental "están bien vigiladas", de ahí que advirtiera de que la cooperación de España con estos países "no se debe limitar sólo a evitar la invasión de pateras sino también a tratar de prevenir el cáncer de la delincuencia organizada y del terrorismo".
Agregó que en el Norte de África, así como en la zona subsahariana se están produciendo problemas que no radican únicamente en el terrorismo integrista sino que también el cambio climático "está provocando grandes movimientos de población del Norte al Sur, lo que está produciendo choques religiosos".
Por ello, dijo, que la zona de influencia yihadista se extiende "cada vez más hacia el Sur y hay países gravemente afectados" por dicho terrorismo que están en la costa del Atlántico.
De todos modos, aunque indicó que la inmigración en sí misma "no es terrorismo porque el 99 por ciento" son personas que "vienen huyendo de la miseria y a mejorar sus condiciones de vida", sí consideró que la inmigración ilegal "es un disfraz muy eficaz para esconder la posibilidad de hacer penetrar algunos elementos que pueden ser terroristas", así como para estudiar la forma de actuar del país.
