La Audiencia Nacional juzgará el viernes al etarra De Juana por las amenazas que impidieron su excarcelación

MADRJID, 22 Oct. (EUROPA PRESS) -

La Sección Primera de lo Penal de la Audiencia Nacional juzgará el próximo viernes a Ignacio de Juana Chaos por integración en ETA y por seis delitos de amenazas terroristas vertidos en artículos que el preso etarra, quien el pasado día 8 abandonó una huelga de hambre que mantenía desde agosto, publicó en el Diario "Gara" en 2004. En su escrito de conclusiones provisionales, la Fiscalía solicita por estos hechos 96 años de cárcel, si bien se plantea rebajar sustancialmente su petición de pena durante la vista.

Fuentes de la Fiscalía anunciaron la semana pasada que la rebaja podría llegar hasta solicitar únicamente 6 años de prisión. La razón de la modificación de la postura de la Fiscalía obedece a la consideración de los hechos como un delito continuado, en vez de como varios delitos independientes de amenazas, al encontrar desproporcionada una condena de 96 años por los hechos juzgados.

Según las mismas fuentes, por cuestiones de derecho procesal, el representante del Ministerio Público no puede realizar formalmente una rebaja en su petición de pena para De Juana hasta el momento de elevar sus conclusiones durante la vista oral, después de que se practiquen todas las pruebas del plenario.

Esta nueva imputación por amenazas evitó que el etarra fuese excarcelado en febrero de 2005, después de haber cumplido 18 años de prisión de los casi 3.000 a los que había sido condenado por once atentados en los que murieron 25 personas.

ACUSACIÓN.

El fiscal Jesús Alonso considera que el etarra amenazó en sus escritos titulados "El Escudo" (publicado el 1 de diciembre de 2204 en "Gara") y "Gallizo" (publicado el 30 del mismo mes y año) a los directores de prisiones Antonio Diego Martín, Jesús Eladio del Rey, Francisco Sanz, Manuel Sebastián Martínez y Miguel Rodríguez.

En el texto titulado "El Escudo", De Juana Chaos afirmaba que el presidente de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional, Javier Gómez Bermúdez, era una "estrella meteórica labrada sobre sufrimiento vasco" y le culpaba de impedir su salida de prisión. En el artículo "Gallizo" (apellido de la directora general de Instituciones Penitenciarias, Mercedes Gallizo) acusaba directamente a los cinco directores de centros penitenciarios citados de torturar a los "presos políticos vascos".

Con ello, según el escrito de la Fiscalía, el preso buscaba que las citadas personas "se conviertan en blanco de la organización criminal para de este modo lograr que el Estado cambie su política" y añadía que dichas amenazas "están amparadas en la condición de militante de ETA del procesado De Juana Chaos, cuya organización ha matado y secuestrado a diversas personas de este cuerpo de funcionarios a lo largo de la historia".

Alude igualmente Alonso a las cartas personales en las que el procesado celebró "de manera cruel e inhumana" el asesinato del concejal del PP en Sevilla Alberto Jiménez Becerril y su esposa, Ascensión García, el 30 de enero de 1998. También queda acreditada la continuación de la pertenencia a ETA de De Juana por una carta desde la prisión de Algeciras que publicó el diario "Egunkaria" en la que denunciaba la situación de los presos de la banda.

HUIDA EN HELICÓPTERO.

Añade el fiscal que De Juana ejerció "funciones de captación de nuevos militantes" en prisión, como la del ya condenado por el Tribunal Supremo José Luis Muñoz Rodríguez en 1998, a quien propuso que se informase sobre el manejo de helicópteros con el fin de articular su fuga del centro penitenciario de Herrera de la Mancha (Ciudad Real).

A juicio del Ministerio Público, De Juana "sigue la política diseñada y dirigida por la banda terrorista y criminal ETA" como lo demuestran los múltiples expedientes disciplinarios incoados al mismo por seguir dichas directrices, como huelgas de patio, denuncia de torturas e incumplimiento de la normativa penitenciaria en general.

HARRIET IRAGI.

Precisamente, la Sección Tercera de lo Penal de la Audiencia Nacional juzgará mañana, también por amenazas terroristas, al preso etarra Harriet Iragi, para quien el fiscal Luis Barroso pide dos años de cárcel por las amenazas proferidas en julio y en agosto de 2005 contra funcionarios de la prisión en la que cumple condena.

Según el escrito de conclusiones provisionales, el 22 de julio de 2005, durante el recuento reglamentario, Iragi se dirigió a un funcionario y le gritó: "¿Cuándo vais a dejar de dar por culo? Todo esto lo vais a pagar caro".

El 5 de agosto de ese mismo año, Iragi se dirigió a otro guardia durante el reparto de la cena exigiéndole que le identificara al funcionario anterior, al que llamó insultó por haberle abierto un parte por el incidente ocurrido.

"No estoy insultando a nadie -le dijo el preso al guardia-. Sólo digo que el que me ha dado el parte es un gilipollas y que lo va a pagar, quiero que me identifique a ese guardia. No me callo porque no quiero y lo que estoy diciendo es la puta verdad. Si me tratáis como un gilipollas, os diré que los gilipollas sois vosotros y de ésta más de uno se va a acordar", agregó.

Según el fiscal, los funcionarios de prisiones a los que se dirigió las mencionadas expresiones se sintieron "seriamente amenazados en su vida e integridad física al ser vertidas por quien pertenece a una banda terrorista" entre cuyos objetivos ha tenido a funcionarios de Instituciones Penitenciarias, "algunos de los cuáles han sido asesinados o secuestrados por la banda terrorista ETA".