Caamaño dice que "todos los países" han "improvisado" ante los riesgos de la crisis y compartido las medidas

MADRID 10 Jun. (EUROPA PRESS) -

El ministro de Justicia, Francisco Caamaño, afirmó hoy que "todos los países" han "improvisado" ante los riesgos imprevisibles de la crisis económica "y compartido también las medidas de reacción" y han tenido que adecuar las respuestas "ante ese cambio imprevisible de una evolución económica todavía por descifrarse". "En esto, España no es ni original, ni diferente", subrayó.

Caamaño hizo estas declaraciones durante su intervención en las 'Tertulias sociales y de Economía del Entorno Empresarial' y recalcó que el ajuste español "está en sintonía con el del resto de países europeos, y eso es una verdad constatable".

Asimismo, reprochó que "algunos" digan que la economía española está "en libertad vigilada" porque, a su juicio, eso implicaría decir "que también toda Europa está en libertad vigilada". En este sentido, calificó de "paradójico" que esas afirmaciones las hagan "los mismos que ahora defienden un mercado abierto, que fue lo que provocó la crisis".

"DIRIGIR EL RUMBO"

Por otro lado, apuntó a que hay que afrontar la situación porque "esperar a que escampe para emprender el camino no es muy útil". A pesar de que las decisiones "no siempre sean fáciles", cree que son el Gobierno y la actuación conjunta de los Estados de la Unión Europea "quienes tienen que dirigir el rumbo para capear la tormenta".

En este sentido, apostó por "pasar de ir a más a ir cada vez a mejor", mejorando la educación, la formación y el I+D+I. "Apostar por eso tiene un precio y exige políticas públicas, así que exige también gasto público", subrayó.

En otro orden de cosas, felicitó a las comunidades autónomas que han incrementado los impuestos sobre las rentas más altas porque así ya no podrá decirse "que sólo generan gasto, sino que también incrementan la recaudación". "Felicito a quienes lo están haciendo", remachó.

Preguntado por una posible huelga general, respondió que podrá haberlas, porque es un derecho de los ciudadanos, y el Ejecutivo las respetará, pero que, aún así, el Gobierno tendrá que hacer reformas porque es su responsabilidad hacerlo.