1-N.- Carod dice que Mas debe "abrir el baile" negociador pero él trabajará en paralelo con PSC e ICV-EUiA

Actualizado: jueves, 2 noviembre 2006 16:06

BARCELONA, 2 Nov. (EUROPA PRESS) -

El presidente de ERC, Josep Lluís Carod-Rovira, insistió hoy en que los republicanos no cierran "ninguna puerta, de entrada", ante los posibles pactos postelectorales, y dijo que es a CiU "a quien corresponde abrir el baile" negociador "y que explique qué música le gustaría que saliera".

No obstante, apuntó que ello no impedirá que el propio Carod mantenga contactos paralelos con PSC e ICV-EUiA. De hecho, prevé mantener conversaciones telefónicas hoy mismo con José Montilla y Joan Saura. También dijo que no ha hablado con el presidente del Gobierno y líder del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero.

En rueda de prensa tras la reunión de la ejecutiva del partido, Carod reafirmó la voluntad de ERC de participar en un Gobierno de la Generalitat "que no se decida en Madrid" y explicó que lo "lógico" es que sea CiU quien "inicie las conversaciones". Así las cosas, el propio Artur Mas le confirmó anoche en una extensa conversación telefónica su determinación de reunirse esta misma semana con Montilla, antes de hacerlo con Carod.

El candidato republicano mostró su "respeto" por que el ganador de las elecciones quiera empezar reuniéndose con el segundo, pero Carod insistó en que "eso no quiere decir que el tercero tenga que esperar".

COMITÉ NEGOCIADOR.

Al margen de los contactos entre los líderes de cada partido, ERC ha nombrado a sus negociadores, que estará integrado por el presidente del Parlament, Ernest Benach, el adjunto a la secretaría general del partido, Xavier Vendrell, y el responsable de política municipal, Jaume Oliveras. Ellos llevarán las reuniones más "técnicas" del proceso, acompañados por especialistas sectoriales si es necesario.

Todos forman parte de un comité de negociación, que se reunirá cada día hasta que se forme gobierno. Los demás integrantes son Carod (presidente del comité), Joan Puigcercós, Marina Llansana, Joan Ridao, Rafael Niubó, Josep Huguet, Carmel Mòdol y Pere Vigo.

El líder republicano constató su "voluntad de ser en un gobierno de Catalunya decidido desde Catalunya" y con "manos libres" frente "a Madrid y a intereses económicos muy determinados". Además, afirmó que ERC quiere mantener los objetivos con que ha estado en la Generalitat en esta legislatura, y desplegar el Estatut de la manera "lo máximo ambiciosa posible".

Reiteró que, sea cual sea el próximo gobierno catalán, ERC apuesta por las siete "condiciones básicas" para negociar lo que planteó en campaña; por 'pactos nacionales' sectoriales; y por "unidad de acción" de los partidos catalanes en las Cortes en temas "esenciales", entre las formaciones que estén en la Generalitat y también las que no.

Sobre nombres y cargos, se limitó a decir que ERC aún no se lo ha planteado, aunque mostró dos intenciones: que Ernest Benach siga presidiendo el Parlament, y que el 'conseller en cap' sea de la segunda fuerza del gobierno que se forme. Pero remarcó la necesidad de "humildad" de "todos" los partidos.

LO "LETAL" PARA EL PSC.

Aunque admitió que en estos momentos nadie puede poner condiciones irrenunciables, sí dijo que ver al PSC formar grupo parlamentario propio en el Congreso sería "una muy buena noticia para Catalunya". Sobre la posibilidad de que el PSOE interfiera en las negociaciones postelectorales, avisó de que "quien más tendría que temerlo es el PSC", porque sería "letal" que los catalanes "se pregunten para qué sirve el PSC".

Sobre la propia ERC, Carod-Rovira reiteró que ha cumplido sus objetivos "esenciales": no bajar de 20 diputados y ser "decisiva" tras las elecciones. Lo dijo con "alegría serena" pero con la sensación de que es más importante conseguir ahora 21 escaños que 23 en las pasadas elecciones catalanas, porque en esta legislatura ha habido una "criminalización" de ERC y un "linchamiento" del propio líder.

CIU PUDO ALCANZAR 50 ESCAÑOS.

En cuanto a CiU, repitió que "ha fracasado" el "presentar las elecciones como 'CiU o el caos'", y consideró que hubiera podido alcanzar los 50 diputados si hubiera hecho una campaña "más al estilo de Jordi Pujol", es decir, "más tranquila" y "no arrogante".

También se refirió al nuevo partido parlamentario, Ciutadans. Según él, "son tres escaños que, sumados a los 14 del PP, es el mejor resultado que había obtenido en su momento Aleix Vidal-Quadras cuando se presentó con un programa que, en muchos aspectos, hace pensar en el que presenta Ciutadans".

El líder independentista dedujo que "quizá hay cambio de siglas, pero hay poco movimiento por debajo. En todo caso, el movimiento importante ya se ha producido hace tres años; ahora se van consolidando espacios poco a poco".

Carod hizo referencia a todos los partidos para pedir autocrítica sobre el hecho de que haya tantos electores a quienes "no importe" mucho la configuración del Parlament, ya que lo atribuyó a un "empacho de mala política".

Por ello, pidió "proximididad entre la política democrática y los intereses de la gente" --para lo que pidió la colaboración de los medios de comunicación--, y aprovechar que existe la "posibilidad de que vuelva la política constructiva, de pacto".