Castells intentará hoy sumar formalmente al PP catalán en el frente para la financiación
BARCELONA, 11 Ago. (EUROPA PRESS) -
CiU, ERC, ICV-EUiA y PP apelaron hoy al 'no' de los 25 diputados del PSC en el Congreso a los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2009 como "palanca" para forzar un acuerdo satisfactorio en torno al nuevo modelo de financiación de Cataluña, una vez expirada la fecha establecida por el Estatut -9 de agosto-- como límite para el acuerdo entre el Estado y la Generalitat.
En declaraciones a TV3 recogidas por Europa Press, representantes del tripartito -excepto del PSC, que no asistió a la cita-- y CiU advirtieron hoy de que no rebajarán sus planteamientos, recogidos por el Estatut, para la negociación del nuevo sistema de financiación catalana.
Los portavoces parlamentarios de CiU, Oriol Pujol, de ERC, Anna Simó, y de ICV-EUiA, Jaume Bosch, manifestaron su intención y compromiso de ir unidos "hasta el último minuto", según Pujol, para conseguir la financiación que establece el Estatut. "Hasta el último minuto estaremos codo a codo con Castells", aseguró.
"El Gobierno del PSOE debe entender que no hay PGE si no hay financiación", advirtió Bosch, que emplazó a sus homólogos a mantener la unidad también para forzar la comparecencia del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, en diputación permanente en agosto, porque "no puede ser que pase el plazo (9 de agosto) y Zapatero no diga nada". "Zapatero tiene la habilidad de desaparecer cuando hay problemas", criticó Pujol.
Pujol definió el eventual 'no' del PSC a los PGE como la "auténtica palanca" para forzar el acuerdo de financiación, algo con lo que coincidió Mejías, y Bosch emplazó también a PNV y BNG, en el marco de la coalición con CiU Galeuscat, a vetar los PGE si no hay acuerdo para la financiación catalana. Simó llamó a "mantener la unidad" no sólo en la vinculación de la financiación a los PGE, sino también a la hora de modificar la LOFCA.
Para Simó, con el incumplimiento del 9 de agosto -del que todos los partidos culparon al Gobierno-- se ha iniciado un "camino de no retorno a errores pasados" a la desunión de los partidos catalanes, cosa con la que coincidió Pujol, que abogó por "ir mimando la unidad y cuidándola para no dar opciones a la ruptura".
Tanto ERC como ICV-EUiA defendieron que la Diada del 11 de Setembre debe ser un "buen momento para escenificar", según Bosch, la "unidad imprescindible de las fuerzas catalanas pero también de la sociedad civil".
También están de acuerdo ICV-EUiA y CiU en el hecho de que, según Pujol, "la unidad de acción de estos días, a quién valida de verdad es al proceso estatutario". Para Bosch, "ahora se demuestra, pese a las dificultades, la fuerza del Estatut". Y Pujol alertó de la posibilidad de que Zapatero espere a que el Tribunal Constitucional "haga el trabajo sucio para que (Zapatero) no tenga que cumplir lo que él mismo votó".
Para Mejías, el incumplimiento del Gobierno del Estatut y sus plazos no hace más que demostrar que Zapatero "les ha engañado de manera clara y flagrante" durante el proceso estatutario, cosa que "manifiesta un claro menosprecio hacia los catalanes".
LA AUSENCIA DEL PSC
Mientras la ausencia del PSC a la tertulia política televisiva llevó a Bosch a "lamentar" esta actitud -aunque matizó que el conseller Castells "lo está haciendo bien"--, Pujol dijo haber detectado "diferente sensibilidad del PSC en el Govern de quienes no están" en el Ejecutivo catalán, dejando entrever una vez más la sintonía de la federación con Castells.
Pero Pujol rechazó ir más allá y explicar a qué se refiere cuando habla de "diferente sensibilidad" entre los miembros del PSC en el Govern y los que no están en él. Y renunció a ello, según dijo, para no poner en riesgo precisamente una unidad que "suena bien, porque hay una base con una posición clara" que al menos el tripartito y CiU quieren "hacer respetar y cumplir".
Y pese a que el PP de Cataluña aún exhibe distancia en los matices con el frente del Govern y CiU, hoy Mejías se ratificó en la voluntad de los populares catalanes de sumarse a este frente, aunque en base a la multilateralidad, que la misma Simó reconoció que también puede extraerse del Estatut.
"Para avanzar bien y para avanzar juntos -argumentó Simó--, hay que conocer lo que dice el Estatut. Y del Estatut se deriva la multilateralidad además de la bilateralidad", advirtió tras defender el concierto económico como modelo óptimo para ERC. Simó advirtió de que el acuerdo "debe ser en base a la mejor interpretación posible de la literalidad del Estatut", un texto "interpretable".
"Valoramos positivamente que haya unidad de criterio", dijo Mejías, que opinó que la solidaridad debe aplicarse en base a la sanidad, la educación y la dependencia. Es precisamente en relación a este criterio que dijo que el PP de Cataluña da su "apoyo a la actitud del Govern".
3.800 MILLONES, POSIBLE CIFRA
Pujol dijo estar convencido de que este mes de agosto el Govern y CiU -y PP si finalmente opta por sumarse formalmente al frente catalán- acordarán una cifra y el método para la negociación.
Pujol dijo "sospechar" que la cifra de los 3.800 millones de euros de más que debería recibir Cataluña con la nueva financiación a criterio de la Cámara de Comercio de Barcelona, es la cifra que baraja el conseller Castells. Para CiU la cifra óptima son 4.200 millones, aunque Pujol admitió de que en un eventual acuerdo con el estado esta cifra será inferior. Los 3.800 millones "se ajustan a las necesidades" de Cataluña, según Mejías.
Quien mostró más claramente su escepticismo ante un eventual acuerdo de Cataluña con el Gobierno fue Mejías, quien criticó las "mentiras de Zapatero", que, en su opinión, no podrá dar cumplimiento a la financiación que él mismo apoyó en el Estatut. "Por esto decíamos que se tenía que desvincular (la financiación) del Estatut", añadió. "Quien diga que hay que desvincular financiación de Estatut, no ha entendido nada", apostilló Pujol.
Para Mejías, además de la unidad de los partidos catalanes, el Govern debe buscar también la "unidad no sólo en Cataluña", sino también con las Comunidades Autónomas con posiciones similares a la catalana, como sería el caso de la Comunitat valenciana, para encarar la negociación con "más fuerza" e "incorporar un elemento de presión". Bosch consideró "importante y positivo que el PP se añada" a la unidad para la financiación, pese a su incredulidad con ello.
Precisamente, esta tarde el conseller de Economía y Finanzas, Antoni Castells, se reúne con la presidenta del PP de Cataluña, Alicia Sánchez Camacho, con el objetivo de sumarla formalmente en el frente del Govern y CiU para la financiación.
Camacho ya anunció su intención de figurar en el frente catalán para la financiación siempre y cuando no se vincule al Estatut y que el nuevo modelo pueda consensuarse con el resto de Comunidades Autónomas de régimen común. Castells también se reunirá hoy con el portavoz de C's en el Parlament, José Domingo.
