El exconsejero pidió más tiempo para 'defenderse', pero la Cámara no quiere dilatar el asunto más allá del siguiente pleno
MADRID, 22 Sep. (EUROPA PRESS) -
La Comisión del Estatuto del Diputado ha concedido unos días más de margen al exconsejero de Empleo andaluz José Antonio Viera --el único imputado en el caso de los ERE fraudulentos que mantiene su escaño en la Cámara Baja-- para que presente alegaciones al suplicatorio solicitado por el Tribunal Supremo para poder investigarle, pero este órgano tiene decidido que el asunto se votará la próxima semana en el Pleno del Congreso para su aprobación definitiva.
El órgano que preside el 'popular' Aurelio Romero se ha reunido en el Congreso y ha analizado la petición cursada por Viera para obtener una ampliación del plazo que inicialmente se había fijado para que presentara alegaciones.
El primer plazo fijado por la comisión finalizó el pasado viernes, día 18 y la comisión ha decidido atender la solicitud del imputado para no perjudicarle, según han explicado asistentes al encuentro. Eso sí, también le han advertido de que quieren que el suplicatorio se debata en el próximo Pleno del Congreso, fijado para la semana que viene, porque no quieren que el asunto se dilate en el tiempo, sino que se resuelva cuanto antes.
NO ADMITEN DILACIONES
Por eso han prorrogado el plazo de alegaciones hasta el próximo lunes, y la comisión volverá a reunirse al día siguiente para remitir el asunto al Pleno con independencia de que Viera haga o no ejercicio de su derecho de hacer alegaciones a la petición del suplicatorio.
El propio Viera explicó este lunes a Europa Press que no se oponía a perder el fuero y que ratificaría ante el Congreso la misma versión que ofreció el pasado mes de abril al juez Alberto Jorge Barreiro, quien instruye la causa de los ERE en el Tribunal Supremo y que imputa al exconsejero los delitos de prevaricación administrativa y malversación de fondos públicos.
En aquella declaración, el entonces todavía diputado del PSOE --ahora forma parte del Grupo Mixto tras negarse a renunciar el escaño cuando el Supremo pidió permiso para investigarle-- aseguró que su labor en la Consejería de Empleo se limitaba a la acción política, negó que hubiera creado la estructura que dio origen a la supuesta trama fraudulenta y descargó la responsabilidad en las personas que estaban por debajo de él en el organigrama de la Consejería
La Sala de Admisión del Tribunal Supremo solicitó el suplicatorio contra Viera el pasado 9 de julio y dejó en suspenso las tramitación de las actuaciones que le afectan hasta que se pronunciase el Congreso.
Dado que julio y agosto son inhábiles a efectos parlamentarios, los 60 días con los que cuenta el Congreso para tramitar el suplicatorio no empezaron a contar hasta el pasado 1 de septiembre, cuando arrancó el periodo ordinario de sesiones. Si transcurridos esos dos meses la Cámara no se hubiera pronunciado el suplicatorio se entendería como denegado.
PÉRDIDA AUTOMÁTICA DEL FUERO
Si se apuraran esos 60 días de plazo podría darse el caso de que el Congreso se disolviera con motivo de la convocatoria de las elecciones generales antes de haber decidido sobre la petición del Supremo. De llegar a ese extremo, el exconsejero perdería el fuero de forma automática al dejar de ser diputado y no formar parte de la Diputación Permanente.
Pero PP, PSOE e Izquierda Plural (IU-ICV-CHA), las formaciones que han acudido este martes a la reunión de la Comisión del Estatuto del Diputado, han dejado clara su determinación de remitir el asunto al Pleno para que sea votado el próximo jueves, por lo que ya han avisado a Viera de que, si quiere hacer alegaciones, no podrá demorarlas más allá del lunes.
Cuando el Pleno se haya pronunciado sobre el suplicatorio, el presidente del Congreso, Jesús Posada, tendrá ocho días de margen para comunicar el resultado de la votación al presidente del Tribunal Supremo y de Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Carlos Lesmes.
