SEÚL, 7 May. (Reuters/EP) -
El incremento de actividad en el lugar donde las autoridades de Corea del Norte realizaron en el pasado sus ensayos nucleares ha levantado la voz de alarma en la región, ya que como sugieren fuentes del Gobierno surcoreano consultadas por el periódico 'Chosun Ilbo', podría tratarse de un anticipo de una nueva prueba.
Pyongyang ya realizó un test nuclear en octubre de 2006 que fue respondido por la comunidad internacional con críticas y por la ONU con sanciones financieras y comerciales. Sin embargo, los expertos consultados anticipan que en cuestión de semanas podría tener lista una reedición de estos ensayos, en respuesta precisamente a las amenazas internacionales tras el lanzamiento de su último cohete, a principios del pasado abril.
"Las pruebas nucleares clandestinas son difíciles de predecir y no se puede decir con exactitud cuándo serían posibles, pero pensamos que Corea del Norte está preparada para realizar un ensayo en un futuro cercano si así lo quiere", afirmó una fuente gubernamental. Por este motivo, las autoridades surcoreanas vigilan con lupa la actividad en Phunggye-Ri, ubicado en la provincia de Hamgyong del Norte, donde se produjo el test de 2006.
Asimismo, Pyongyang parece haber comenzado la construcción de un nuevo lugar de lanzamiento para futuros misiles de largo alcance. Este enclave se localizaría en la zona occidental del país y, según los planes revelados en el rotativo, estará listo previsiblemente a finales de año.
