BARCELONA, 3 Sep. (EUROPA PRESS) -
El portavoz del Gobierno catalán, Francesc Homs, considera que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, desearía una baja participación en la manifestación de la Diada de Cataluña del 11 de septiembre para rechazar las exigencias de Cataluña como el pacto fiscal.
"A Rajoy, si le dieran a escoger, le gustaría una manifestación bien pequeña, una cosa bien testimonial para decir que somos cuatro", ha sostenido en declaraciones a Catalunya Radio recogidas por Europa Press, porque sería un argumento que utilizaría en el encuentro con Mas este setiembre para rebajar y no abordar las exigencias de Cataluña.
Por ello, ha reclamado el apoyo de los catalanes al presidente de la Generalitat para conseguir una gran movilización el 11 de septiembre, a la que él aún no ha decidido si acudirá, y ha asegurado que no le molesta el lema de la manifestación 'Cataluña, nuevo Estado de Europa', aunque ha dejado claro que la primera estación es el pacto fiscal.
Sobre la situación de las arcas catalanas, ha insistido en que es delicada y que será necesario recurrir a otros instrumentos como un 'crédito puente' si no se logra poner en marcha el Fondo de Liquidez Autonómica (FLA) hasta octubre, como ha avanzado este lunes el consejero de Economía, Andreu Mas-Colell.
Tras negar que el Govern se plantee avanzar elecciones, también ha lamentado las críticas de presidentes autonómicos del PP, como el de Galicia, Rioja y la de Madrid, contra Cataluña.
"Tengo la sensación que lo que les molesta es que tengamos lengua, identidad y cultura propia. Esto forma parte de la voluntad de ser, expresada democráticamente", y que deberían aceptar, ha subrayado.
Además, ha expresado su preocupación de "gente bien informada caiga en la trampa de presentar las cosas de forma tan poco ajustada a la realidad" con el objetivo, a su juicio, de contaminar el debate.
Y es que, según Homs, Cataluña sólo reclama lo que le pertenece, y ha reprochado que dirigentes políticos jueguen con este "equívoco", por lo que ha pedido que los catalanes puedan administrar sus propios recursos y que se publiquen las balanzas fiscales cada año.
