MADRID, 13 Nov. (EUROPA PRESS) -
El Pleno del Tribunal Constitucional reanudará el próximo lunes sus deliberaciones sobre los siete recursos presentados contra el Estatut de Cataluña, tras conocerse que, en el marco de estas sesiones, seis de los diez magistrados que estudian este asunto habrían rechazado la ponencia de la magistrada Elisa Pérez Vela, favorable a avalar el texto.
Fuentes de este órgano señalaron a Europa Press que, en el actual escenario, la opción que parece como más factible es que la ponente reelaborase su propuesta de la ponencia en determimados aspectos con el fin de concitar un mayor consenso. Esta posibilidad entraña sin embargo cierta dificultad de éxito visto lo ocurrido en el "sondeo" realizado ayer en el alto tribunal, que ha dejado demostrado que si bien existe mayoría para tumbar la ponencia, en la situación actual no habría votos suficientes para sacar una sentencia adelante.
Otras opciones, según las mismas fuentes, pasarían por la redacción de una nueva ponencia por parte de la magistrada Pérez Vela o bien que ésta, al no poderse superar la actual situación, renuncie a la misma. En este caso, la presidenta del Constitucional, María Emilia Casas, debería designar nuevo ponente o bien asumir ella misma la elaboración del texto que sería más tarde sometido al Pleno del Tribunal.
Según las informaciones difundidas hoy, durante la consulta realizada se habrían posicionado a favor de la ponencia, además de su autora, la propia presidenta del tribunal y los magistrados de tendencia progresista Eugeni Gay y Pascual Sala. En contra habrían votado el vicepresidente del tribunal, Guillermo Jiménez, y los magistrados Vicente Conde, Jorge Rodríguez Zapata y Javier Delgado, todos ellos situados en el sector conservador del tribunal, a los que se habría sumado Manuel Aragón, quien por su actuación hasta el momento venía siendo situado en el ala progresista.
PALABRAS DE CAAMAÑO
Preguntado por la situación actual de las deliberaciones en el alto tribunal, el ministro de Justicia, Francisco Caamaño, señaló hoy que "lo más conveniente" es dejar al tribunal que realice su trabajo para dictar una resolución respecto de la cual se mostró convencido de que "será buena para España y para Cataluña".
Preguntado por el sentido de esta manifestación, el titular de Justicia aclaró que lo que había querido decir es que, "en un estado democrático, el intérprete máximo de la Constitución es el Tribunal Constitucional", y que "lo que debemos esperar es una buena sentencia, en la que se dé claridad de los preceptos contenidos en el Estatut, como ocurre en otras ocasiones".
Durante la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, Caamaño fue preguntado por la tardanza del Tribunal Constitucional para sacar la sentencia tras haber pasado ya tres años desde la presentación del recurso contra el Estatut por parte del PP y varias comunidades autónomas.
A este respecto, Caamaño dijo que los asuntos que llegan al Tribunal Constitucional "no son nunca fáciles, pues dependen de la intensidad y la complejidad de los mismos". Además, se mostró contrario a fijar un plazo máximo para que éste órgano emita sus resoluciones. "Lo importante son las buenas sentencias", concluyó.
