BARCELONA, 12 Jul. (EUROPA PRESS) -
El 'sí' del tripartito al nuevo modelo de financiación autonómica, que reportará a Cataluña 3.855 millones en 2012, ha vivido en las últimas 72 horas un sprint final, que contrasta con los once meses de incumplimiento del plazo recogido por el Estatut para cerrar el acuerdo con el Estado, el 9 de agosto de 2008.
Con la fecha límite del 15 de julio fijada por el presidente José Luis Rodríguez Zapatero, el pasado jueves por la noche se vivió uno de los momentos claves, cuando el conseller de Economía, Antoni Castells, volvió de Madrid con un preacuerdo con la vicepresidenta económica del Gobierno, Elena Salgado.
La oferta que se filtró contemplaba para Cataluña 3.100 millones de euros en 2012 --cuarto año de aplicación del modelo-- y otros 400 millones adicionales correspondientes a las competencias exclusivas en Mossos y cárceles, a la vez que mantenía la renta per cápita de los catalanes por encima de la media.
Este movimiento cogió por sorpresa a CiU --que prácticamente nunca ha conocido las cifras que se manejaban--, mientras que la cúpula de ERC se apresuró a extender que el acuerdo no estaba en ningún caso cerrado y que mantenían sus exigencias. En ese momento, al margen del PSC, ICV era el único socio del tripartito que garantizaba el 'sí'.
A primera hora del viernes llegó el desmentido oficial por parte de la Conselleria de Economía a que hubiera acuerdo y se habló de flecos pendientes, pero no se negó la existencia del preacuerdo Castells-Salgado.
A lo largo del día se sucedieron reuniones en las sedes de cada uno de los socios del Govern. Departieron Montilla con Castells, éste con Puigcercós y Ridao (ERC) y con Saura y Herrera (ICV), con situaciones cómicas como cuando el conseller de Economía interrumpió su ronda de contactos para ver pasar el Tour por delante de su conselleria.
El presidente Montilla mantuvo su agenda de actos y viajó a la academia militar de Talarn (Lleida) para entregar despachos a los militares. No obstante, sus colaboradores se apresuraron a explicar que el president mantenía constantes conversaciones telefónicas con Zapatero y la ministra Elena Salgado.
Por su parte, CiU dejó claro que no iba a aceptar ninguna oferta si no se alcanzaban los 5.000 millones de euros en tres años, de acuerdo con el calendario que marca el Estatut. A su vez, PP y C's reiteraron sus conocidas posiciones en contra del modelo que defiende el tripartito.
El día transcurrió entre tiras y aflojas y por la noche se produjo la esperada reunión entre el president Montilla y la cúpula de ERC (Puigcercós y Ridao). En todo este asunto, apenas tuvieron protagonismo el vicepresidente de la Generalitat, Josep Lluís Carod-Rovira, y el conseller de Interior, Joan Saura.
ERC LUCE
Día 3. El sábado fue el día de ERC. El partido de Puigcercós escenificó mediáticamente sus intentos por mejorar la última oferta del Gobierno, que por entonces rondaba los 3.400 millones de euros en cuatro años, un año más de lo que marca el Estatut, una circunstancia que llevó a CiU a decir que el modelo que se quería pactar era "ilegal".
ERC, por cuya sede pasaron economistas y asesores, a la vez que fotógrafos y cámaras para certificar sus trabajos, reiteró sus exigencias: 3.800 millones en el tercer año de aplicación del modelo.
Mientras tanto, Montilla, en la sombra desde su despacho de Palau, se dedicó a granjearse el apoyo de las patronales y sindicatos catalanes. Tanto UGT como CCOO, por un lado, como Fomento del Trabajo y la Cámara de Barcelona por el otro bendijeron el modelo y así lo declararon a la prensa.
Por la tarde, el PSC hizo pública la última oferta del Gobierno: entre 3.400 y 3.600 millones de euros en cuatro años, un año más de lo que marca el Estatut. Todavía insuficiente para ERC.
LLEGA EL 'Sí'
El domingo, de nuevo el tripartito cedió todo el protagonismo a ERC. La ejecutiva republicana se reunió de forma extraordinaria en su sede durante toda la mañana para debatir sobre la oferta del Estado.
A partir de entonces todo siguió una pauta. Sobre las 13 horas, la vicepresidenta Elena Salgado compareció para explicar el nuevo modelo, con 11.000 millones a repartir entre todas las autonomías y sin explicar qué parte iría a Cataluña. Sí dijo que Cataluña recibiría desde el primer año más dinero que la media en renta per cápita.
El 'sí' de ERC al modelo llegó sobre las 15 horas y pudo verse en directo por televisión. Entonces Puigcercós, en una alocución sin preguntas de los periodistas, dio a conocer el modelo alumbrado: 3.855 millones en cuatro años, fecha en la que Cataluña lograría el 105,6% de la media en términos de renta per cápita.
Puigcercós calificó el día de "histórico" y se jactó de haber plantado cara al Gobierno de Zapatero para elevar la cifra final, aunque advirtió de que el objetivo de los republicanos sigue siendo el concierto económico, en el marco de la independencia de Cataluña.
Por la tarde, todos los partidos han reaccionado y ha sido el turno del presidente de la Generalitat, José Montilla, con una declaración institucional desde la Sala Gótica del Palau.
Tras la 'fumata blanca' de los partidos, que ratificarán mañana en sus ejecutivas de cada lunes, el Consell Executiu dará el visto bueno al modelo el próximo martes. El miércoles día 15, Cataluña elevará el 'sí' al Consejo de Política Fiscal y Financiera, que reúne al conjunto de autonomías.
Una vez aprobado en este órgano, el nuevo modelo se someterá a votación en el Congreso de donde saldrá en forma de Ley Orgánica, para su posterior desarrollo en las comisión bilateral de transferencias entre el Estado y Cataluña.
La Generalitat recogerá las cifras del nuevo modelo en los presupuestos de la Generalitat de 2010, aunque con efectos retroactivos a 1 de enero de 2009, que es lo que marca el Estatut. Éste sigue pendiente del recurso ante el TC y su desenlace se conocerá en los próximos meses, cerrándose previsiblemente el otro gran asunto de la legislatura catalana.
