El Gobierno ultima el plan que guiará la cooperación española hasta 2012, cuando deberá alcanzarse el 0,7

El Consejo de Ministros lo aprobará "próximamente", según Moncloa MADRID 3 Feb. (EUROPA PRESS) -

La vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, presidió hoy la segunda reunión de la Comisión Delegada del Gobierno para la Cooperación al Desarrollo en la que se "ultimaron las líneas maestras" del plan que guiará esta política hasta 2012 y que el Consejo de Ministros aprobará "próximamente", informó Moncloa.

El III Plan Director de la Cooperación Española será el que dirija esta política hacia el objetivo asumido por los socialistas de destinar en esta legislatura el 0,7 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB) a Ayuda Oficial al Desarrollo.

Según informó Moncloa en un comunicado, este plan pretende "consolidar" la cooperación internacional como "política de Estado" y situar a España definitivamente "en la vanguardia internacional en la lucha contra la pobreza y la ayuda al desarrollo".

La crisis alimentaria, el cambio climático y las migraciones serán los ejes centrales de las políticas que se impulsarán, junto a género, educación, salud, agua y saneamiento, gobernabilidad, crecimiento económico, innovación y cultura, precisa la nota.

El plan se fija como prioridad la lucha contra el hambre y la erradicación de la pobreza, especialmente en África subsahariana y América Latina.

En concreto, reducirá de 56 a 50 el número de países en los que establece actuar, en aplicación del Código de Conducta europeo que apuesta por concentrar la ayuda en un número limitado de países y sectores.

Se excluye de este plan --sí estaban en el anterior-- a Turquía y los países balcánicos por ser candidatos a adherirse a la UE en un futuro; a los países asiáticos afectados por el tsunami de 2004 (aunque la ayuda seguirá llegando hasta el fin de los proyectos subvencionados) y a China, Chile y Sudáfrica.

De esas 50 naciones, 19 son latinoamericanas y 14 africanas. Por primera vez, las prioridades de la cooperación española abarcan a 14 de los 30 países más pobres del mundo.

En la reunión de hoy la Comisión Delegada también estudió la reforma del Fondo de Ayuda para el Desarrollo (FAD). El Gobierno pretende sustituirlo por un Fondo para la Promoción del Desarrollo, dedicado exclusivamente a la ayuda al desarrollo, y otro para la Internacionalización de la Empresa española.

La Comisión Delegada trató asimismo las conclusiones de la Reunión de Alto Nivel sobre Seguridad Alimentaria celebrada en Madrid los días 26 y 27 de enero, en Madrid. La Comisión valoró como "muy positivo", según la nota, el compromiso anunciado allí por el Gobierno español de aportar 1.000 millones de euros en los próximos cinco años para financiar políticas y programas de agricultura, desarrollo rural y seguridad alimentaria.

CONSTITUIDA LA COMISIÓN DELEGADA PARA LA UE Por otro lado, De la Vega presidió hoy la constitución de la Comisión Delegada del Gobierno para la Presidencia española de la UE en el primer semestre de 2010 y que será la encargada de impulsar y coordinar las políticas en este ámbito.

De la Vega preside esta Comisión, de la que forman parte el vicepresidente económico, Pedro Solbes y los ministros de Asuntos Exteriores y de Cooperación, Miguel Angel Moratinos, y de Administraciones Públicas, Elena Salgado.

También pertenecen a ella el director del Gabinete de la Presidencia del Gobierno, José Enrique Serrano, el secretario general de la Presidencia, Bernardino León, el Alto Representante para la Presidencia Española de la Unión Europea y otras Reuniones de Alto Nivel, Nicolás Martínez Fresno, el Alto Representante para la presidencia española de la UE en Asuntos Relacionados con la Defensa, Félix Sanz Roldán, y el secretario de Estado para la UE, Diego López Garrido.

Los grandes ejes de la presidencia española serán la aplicación y el desarrollo del Tratado de Lisboa, el impulso de políticas para superar la actual crisis económica internacional, el fomento de la Europa de los ciudadanos, con el objetivo prioritario de avanzar en la igualdad efectiva entre hombres y mujeres, y el refuerzo de la presencia e influencia europeas en el mundo, según Moncloa.