MADRID, 12 Dic. (EUROPA PRESS) -
El secretario de Organización del PSOE, José Blanco, y la secretaria de Relaciones Internacionales y secretaria de Estado para Iberoamérica, Trinidad Jiménez, se reunirán mañana miércoles, en la sede socialista de Ferraz, con el secretario general de Convergencia para la Democracia Social de Guinea Ecuatorial (CPDS), Plácido Micó, que se encuentra en Madrid.
Micó presentó la pasada semana en Madrid el libro 'Trabajo y libertades sindicales en Guinea Ecuatorial', del que es coautor junto a la profesora de la Universidad Autónoma de Madrid, Alicia Campos, y destacó la dificultad para poder legalizar cualquier tipo de organización social, ya sea asociación o de tipo sindical, debido a un régimen político para el que la asociación es "uno de los mayores delitos".
En este sentido, manifestó que existe "gente con iniciativas que quiere asociarse, pero existe un bloqueo en los expedientes de solicitud". Así, calificó el libro como "una descripción de la realidad" que es incluso "más dura y trágica de los que queda reflejado" sobre el papel.
"Es difícil recoger todos los atropellos, bofetadas, despidos indiscriminados, arrogancia de los que tienen el poder económico y político y el sentimiento de indefensión" que viven los trabajadores en Guinea Ecuatorial, "que yo vivo todos los días", explicó. Además pidió que el libro de investigación sirva de "llamamiento a la solidaridad internacional" para que no se olvide la situación ecuatoguineana de "falta de sociedad civil, represión política e injusto reparto de los recursos provenientes de la explotación del petróleo".
Micó recordó que en Guinea Ecuatorial, entre un 3 y un 5% de la población ostenta el 90% de la riqueza, por la sencilla razón de que esta clase dominante, que controla el poder político "tiene un proyecto de sociedad" por el que además de constituirse en "la clase dominante política, acaparen toda la riqueza el país", de modo que si llegan a perder el control político "puedan mantener el poder económico".
Esto, destacó "lo hacen en colaboración con multinacionales petroleras de países democráticos" y explicó que "si desde estos países democráticos se tomaran iniciativas, se podría contribuir a detener este proyecto", haciendo hincapié en el apoyo de la comunidad internacional a la causa democrática ecuatoguineana.
