Huelga.- Los quioscos y floristas de La Rambla cierran sus paradas

BARCELONA, 29 Mar. (EUROPA PRESS) -

Los quioscos de prensa y las paradas de flores de La Rambla de Barcelona han cerrado este jueves con motivo de la huelga general, mientras que buena parte de las terrazas tampoco ha abierto, y han actuado menos estatuas humanas de las habituales en la parte alta de la emblemática vía.

Así, los floristas de La Rambla no han abierto los establecimientos ubicados en medio del paseo, mientras que los quiosqueros, según ha explicado un comerciante de la zona, cerraron este miércoles por la noche, al inicio de la huelga, y ya no han abierto este jueves.

Un buen número de las terrazas y locales de restauración también ha secundado la huelga y han mantenido recogidas sus mesas y sillas, y, de los que trabajaban, alguno ha abierto cuando ha visto que "todo estaba tranquilo", según un camarero.

Por lo que se refiere a las estatuas humanas, sobre las 13.30 horas sólo dos estaban trabajando en la parte comprendida entre la calle del Carme y el Liceu --zona donde se congrega la mayor parte--, mientras que los vendedores ambulantes y trileros se han dejado ver en una proporción similar a la habitual.

Un agente de la Guardia Urbana que patrullaba por La Rambla ha explicado que ha habido una densidad peatonal similar a la de un día laborable normal, si bien ha asegurado que la mitad de comercios de la zona no han abierto, y algunos lo han hecho con la persiana medio bajada para cerrar si llegaban piquetes.

BOQUERIA

En el mercado de la Boqueria muchas paradas han mantenido cerradas las persianas y la actividad ha caído considerablemente: los mismos comerciantes han cifrado el número de paradas activas en tan sólo un 20%.

De hecho, la mayoría de los establecimientos ubicados en los laterales del recinto no ha trabajado, y, de los que sí lo ha hecho, varios de ellos han ido cerrando a medida que avanzaba la mañana.

Un joyero del mercado ha asegurado que el cierre de las paradas ha sido "forzoso por miedo a los piquetes", mientras que, según una charcutera, la huelga ha hecho bajar mucho la clientela y sólo se han mantenido las ventas a turistas.

Desde otra parada de embutidos, su encargado ha asegurado que esta huelga ha sido "la que más repercusión ha tenido en el mercado" y ha coincidido en que el miedo a represalias de piquetes ha cuajado en los paradistas, si bien una frutera ha explicado que sólo ha venido uno en toda la mañana.

CONTENEDORES LLENOS

En la misma línea, en el barrio del Raval muchos de los comerciantes han decidido no abrir o bien lo han hecho con la persiana medio bajada, entre ellos varias tiendas de alimentación, locutorios y algunas charcuterías islámicas.

Varios de los contenedores de la zona han amanecido llenos de bolsas de basura y con algunas depositadas a su alrededor por la falta de efectivos de la limpieza municipal; de hecho, el Ayuntamiento ya aconsejó a los ciudadanos dejar el mínimo de residuos posibles la noche del miércoles para evitarlo.