MADRID, 13 Jul. (EUROPA PRESS) -
Joan Coscubiela y Laia Ortíz, los diputados de Iniciativa per Catalunya (ICV) en el Congreso, ha dirigido una carta al presidente de la Cámara, Jesús Posada, para que tome medidas contra la "todavía diputada" Andrea Fabra, a la que se acusa de haber lanzado en el Pleno un "que se jodan" mientras aplaudía a Mariano Rajoy cuando anunciaba medidas de recorte para los desempleados.
Los diputados de Izquierda Plural (IU-ICV-CHA) aseguran haber sentido "estupor" por la "inaceptable actitud" de esta diputada, "que contribuye al desprestigio de la política, ya muy maltrecha por, entre otras cosas, la falta de cumplimiento de los compromisos adquiridos en campaña electoral o por los reiterados casos de corrupción política".
Recuerdan que el Reglamento del Congreso establece como obligación "el respeto al orden, la cortesía y la disciplina parlamentaria" y que permite la posibilidad de actuar contra los diputados que la incumplan, desde las habituales llamadas al orden hasta la expulsarles si promueven desórdenes graves con sus palabras, e incluso la suspensión de su condición de diputados durante un mes.
"ESPECTÁCULO LAMENTABLE"
ICV señala que el Diario de Sesiones no recogió el "que se jodan" de Andrea Fabra, ni muchos otros gritos que se lanzaron en el Pleno en el que Rajoy anunció la última oleada de recortes, y asegura entender que, en medio de ese "espectáculo lamentable", el presidente de la Cámara no se percatara del exabrupto.
Ahora bien, creen que todavía se está a tiempo de tomar medidas para evitar que estas escenas no vuelvan a repetirse y para que se repruebe la actuación de Fabra ya que "un hecho de esta gravedad no puede quedar impune".
Así, piden que en el próximo Pleno, la Presidencia de la Cámara exprese su repulsa por dicho comportamiento y que conste en el Diario de Sesiones que el Congreso "deplora y no consentirá" que ningún parlamentario falte el respeto a otro, "y mucho menos aún a los ciudadanos que están padeciendo una situación agónica que no han provocado y que les lleva a acercarse peligrosamente a la exclusión social, ante el desdén de algún parlamentario como la todavía diputada Andrea Fabra".
