MADRID, 17 Oct. (EUROPA PRESS) -
La víctima de ETA Irene Villa ha reconocido que el perdón a los terroristas es una cuestión de "libertad personal", pero ha explicado que ella optó por ello para poder "seguir viviendo". "Para poder vivir lo más inteligente es perdonar, con rencor dentro la vida es muy amarga y muy dura. Hay que hacerlo por uno mismo", ha confesado el día en el que se cumplen 21 años del atentado que sufrió junto a su madre en Madrid y en el que las dos sufrieron graves lesiones.
Irene Villa ha recibido el premio 'Coraje Cívico' otorgado por el Observatorio Internacional Víctimas del Terrorismo de la Fundación Universitaria San Pablo CEU por su "ejemplo de dignidad y fortaleza moral" que ha ofrecido a la sociedad desde que sufrió el atentado. En un emotivo discurso, ha querido ofrecer este premio a su hermana Virginia, quien ha confesado que ha sufrido desde 1991 más que su madre y ella misma, y también dedicárselo a Carmen Miranda, viuda de Ramón Carlos Navia.
Irene Villa ha subrayado que se debe lanzar a la sociedad el mensaje de que las víctimas "también cuentan" y la solidaridad con ellas es "muy necesaria", además de "vital en la lucha contra el terrorismo". "Luchamos con la palabra y la dignidad por un mundo sin violencia", ha sostenido antes de abogar por los principios de "verdad, respeto, libertad y paz", aunque la paz "entendida desde la justicia y sin impunidad".
Por su parte, la alcaldesa de Madrid, Ana Botella, ha sido la encargada de entregar el premio internacional 'Coraje Cívico' a la presidenta de la asociación estadounidense Tuesday's Children, Kathy Murphys, que trabaja con niños víctimas del atentado del 11-S en Nueva York. "Ese día todos fuimos estadounidenses", ha evocado Botella antes de asegurar que este galardón recuerda que el terrorismo es una amenaza "global" que recuerda que "la voluntad destructora del terrorismo está dispuesto a romper todos los límites razonables de crueldad y violencia".
La alcaldesa ha recordado que "la lacra del terrorismo" sigue existiendo en el mundo, por lo que ha pedido que no se olvide a las víctimas ni "se mire hacia otro lado". "Las víctimas del terrorismo han sido un ejemplo para toda la sociedad española, muchas gracias por ese ejemplo", ha afirmado tras hacer suyas su exigencia de "memoria, dignidad y justicia".
Según ha recordado, Madrid es una ciudad que ha sido "muchas veces" golpeada por el terrorismo, pero también ha sido protagonista de "muchas de las mejores expresiones de solidaridad con las víctimas", ya que a su juicio la respuesta al terrorismo requiere solidaridad entre los estados, "solidaridad para cooperar y mejorar la respuesta legal, judicial y policial contra los terroristas" y "solidaridad de la sociedad con las víctimas para que su sacrificio no pierda valor".
LA VERDAD DEL 11-M
Por último, el consejero de Presidencia de la Comunidad de Madrid, Salvador Victoria, ha sido el encargado de entregar a la Asociación de Ayuda a las Víctimas del 11-M el premio 'Memoria, Dignidad y Justicia'. El consejero ha recordado la trayectoria de esta asociación desde los atentados perpetrados en Madrid en 2004 y ha alabado que sus miembros hayan querido siempre "dar luz a unos acontecimientos que hoy aún nos preguntamos".
La presidenta de la Asociación de Ayuda a las Víctimas del 11-M, Ángeles Domínguez, ha recordado también la "incansable" labor de su organización por "saber la verdad" de los atentados y ha preguntado por qué las víctimas tienen que "liderar" las actuaciones judiciales para esclarecer los atentados, asumiendo una responsabilidad que considera que debería ser "de los poderes públicos".
La asociación ha recibido este galardón como reconocimiento a su "incansable trabajo en la búsqueda de la verdad" de los atentados de Madrid, así como "por su espíritu de resistencia y especial dedicación en la ayuda psicológica a los afectados".
En la apertura del acto, el director del Observatorio Internacional Víctimas del Terrorismo de la Fundación Universitaria San Pablo CEU, Cayetano González, ha realizado una mención a las elecciones vascas del próximo domingo y ha augurado que, cuando la coalición EH Bildu logre una importante representación en el Parlamento, las víctimas del terrorismo se preguntarán "para qué ha servido su enorme sacrificio". "Se preguntarán para qué ha servido tanto dolor si al final ETA va a dar un paso de gigante para conseguir su objetivo político por el que nació y por el que ha asesinado, la independencia del País Vasco y la ruptura de España", ha lamentado.
Por su parte, el presidente de la Fundación Universitaria San Pablo CEU, Carlos Romero, ha reiterado el compromiso de la institución con las víctimas del terrorismo. "Siempre tendréis aquí un lugar para vosotros, donde expresaros libremente y volcar vuestras necesidades y exigencias", ha garantizado.
El acto ha estado respaldado por numerosas personalidades, como la defensora del Pueblo, Soledad Becerril; el director general de la Policía, Ignacio Cosidó; la directora de la oficina de víctimas del Ministerio del Interior, Sonia Ramos; y representantes de las asociaciones de víctimas del terrorismo, como las presidentas de la Fundación de Víctimas y de la AVT, Maite Pagazaurtundua y Ángeles Pedraza.
